“Yo no le hubiera dado una vivienda a mi hija”

{jaimage crop="ML" /}El presidente de Emvismesa abre una nueva etapa en la sociedad pública después del ‘caso Iglesias’. Lence tiende la mano a la oposición, pero dice que no consentirá su uso político. Hace casi un mes que Javier Lence, otrora gerente del Partido Popular de Melilla, asumió el cargo de presidente de Emvismesa. Se hace cargo de la sociedad pública en un momento delicado, tras el escándalo mediático suscitado por la dimisión de su predecesor, Juan Antonio Iglesias, por una adjudicación, que nunca llegó a efectuarse en firme, de una vivienda pública a su hija. Con Lence se abre una nueva etapa, como así entiende el nuevo presidente en esta entrevista concedida a El Faro en la que deja claro que los miembros de la oposición en el Consejo de Administración le encontrarán a su lado para colaborar, pero en absoluto consentirá que la oposición utilice Emvismesa como “ariete contra el presidente Imbroda y el Gobierno de la Ciudad”.
Sobre los efectos del ‘caso Iglesias’ en la imagen en la sociedad pública así como sus deseos y objetivos en el día a día de Emvismesa, Lence da cuenta en este encuentro con El Faro.
–Ha cogido el testigo de la presidencia de Emvismesa tras la dimisión de Juan Antonio Iglesias hace casi un mes, ¿le ha dado algún consejo para afrontar la gestión de la sociedad pública?
–Lógicamente me ha dado muchos consejos. La línea es básicamente la misma, los objetivos los tenemos marcados por el programa electoral, pero cada uno tiene su impronta personal y es lo único que varía. La línea de trabajo es ejecutar el programa electoral en la materia que me compete. Somos dos personas diferentes y lo haré con mi mejor saber y entender. No va a haber grandes variaciones en este sentido.
–¿Va a tener mano dura con la oposición?
–Aquí la pregunta no es si yo voy a tener mano dura o no, sino qué actitud va a tener la oposición. Si viene a ayudar a que esta empresa mejore y a aportar cualquier tipo de idea o solución a los temas que nos compete al Consejo de Administración, estoy abierto. Si pretenden que Emvismesa sea el ariete contra el presidente Imbroda no lo van a conseguir.
Va a depender mucho de la actitud de ellos. Yo, en mi primer Consejo de Administración, les brindé  mi apoyo. Les dije que no solamente vinieran a las reuniones sino cualquier día y momento pueden venir y se les facilitará cualquier información. Les ofrecí que vivan el día a día de esta sociedad pública. Entiendo que son personas ocupadas, pero que si quieren involucrarse más tienen las puertas abiertas. Estamos para velar por los intereses de esta sociedad. El que no venga con la intención de aportar y colaborar, me tendrá enfrente y no al lado.
–Volviendo sobre el llamado ‘caso Iglesias’, el Grupo Socialista volvió a pedir una comisión de investigación en el último pleno de control, pues considera que hay que depurar más responsabilidades. ¿Está dispuesto a aceptar esta petición?
–A la oposición nunca le parece suficiente cuando las cosas se hacen como se tienen que hacer. Aquí hay dos conceptos, una es el procedimiento administrativo de la adjudicación provisional a la hija de Juan Antonio Iglesias. Como cualquier otro procedimiento, la adjudicación provisional se hace a una persona que reúne unos requisitos. Durante este proceso administrativo tiene que ir documentando una serie de requisitos en unos plazos. Cuando aún está en periodo de documentar y donde se le piden determinadas informaciones, por las razones que ella entiende presenta un escrito en el que renuncia a la vivienda y se para el proceso administrativo.
En cualquier otro proceso, una vez presentada la documentación necesaria, el expediente pasa a la Dirección General de la Vivienda y por último es el consejero de Fomento el que da el visto bueno final. El propio consejero, Miguel Marín, no mintió cuando afirmó que no se había vendido una vivienda a la hija de Iglesias porque cuando presentó la renuncia, el proceso administrativo se paralizó, se cerró.
Emvismesa gestiona y al final quien vende es el consejero. Después viene el paso por la Notaría y el Registro de la Propiedad, como cualquier venta. El proceso culmina como todos los mortales.
–Si todo estaba correcto administrativamente, como dice, ¿por qué dimite Juan Antonio Iglesias?
–Esa es la parte política. Hay que puntualizar que dimitir es un verbo reflexivo, por lo que a uno no lo dimiten, lo decide uno mismo. Juan Antonio Iglesias entiende que ante todo ese revuelo, como él decía, ha cometido un error político porque la presión mediática se lo ha puesto en tela de juicio.
En fin, por las razones que sea, él entiende que estaba en su obligación moral de dimitir. Yo no puedo ni debo justificar o juzgar una decisión que es personal y que respeto. A partir de ahí, yo creo que dio públicamente las explicaciones del por qué de su dimisión.
Mi valoración política personal es que yo no le hubiera dado una vivienda a mi hija. Pero es un criterio absolutamente personal.
Yo entiendo que las familias de los políticos están discriminadas negativamente y tienen que asumirlo. Ese es mi planteamiento. Ni mi hijo ni mis hermanas ni mis hermanos pueden ser beneficiados ni puedo tomar una decisión que ni les beneficie ni les perjudique. Llegado el momento en el que tenga que tomar una decisión sobre mi familia, me abstendré y me quitaré de en medio. Lo tengo muy claro, pero es una decisión personal.  
–¿Cree que el ‘caso Iglesias’ ha dañado la imagen pública de Emvismesa y que haya generado desconfianza entre los melillenses?
–Espero y confío en que no. Yo creo que la mayoría de las personas sensatas que ven lo que ha pasado, la renuncia de la hija de la vivienda y la dimisión de Iglesias, da muestra suficiente de que el tema ha quedado zanjado. Si yo adjudico una vivienda y no termina de comprarse, administrativamente termina, y las responsabilidades políticas las ha asumido Iglesias, por tanto, también se ha zanjado el asunto políticamente por mucho que la oposición pretenda lo contrario.
–¿Cree que la oposición cambiará su actitud a la expectativa de la línea personal que usted plasme en Emvismesa a partir de ahora?
–Me gustaría que colaboraran porque esta sociedad y sus trabajadores se lo merecen. No creo que sea justo que los políticos mermen la imagen de Emvismesa.
Si ha habido un lapsus de un tema que ha contribuido negativamente a la imagen de Emvismesa lo que hay que hacer es lo que ha ocurrido: Asumir responsabilidades y hacer la labor más transparente. La responsabilidad de gestionar dinero público la he asumido y el que venga a contribuir tiene las puertas abiertas y el que venga a destruir en contra de los intereses de esta sociedad me tendrán en frente y no lo va a conseguir.
–Me comenta que ha ofrecido a la oposición que se implique en el día a día de Emvismesa, ¿cómo es la rutina diaria?
–Intensa, la verdad es que hay mucho trabajo en una sociedad pública como ésta. Hay una demanda tremenda de viviendas que es muy difícil de cubrir y poder dar soluciones. Entonces estamos en la gestión del día a día que no es fácil. Estamos cerrando el plazo de las ayudas a los alquileres, tramitando arreglos en las viviendas, personas que vienen a solicitar un cambio... Es un trasiego continuo de melillenses y se les atiende con profesionalidad. Estoy muy contento con la plantilla que hay.{jaimage crop="ML" /}