LA comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, visitará España el próximo 3 de junio.
Ayer, el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, afirmó que ese viaje es una oportunidad excelente para que la política sueca visite nuestra ciudad y pueda conocer así la realidad de la frontera melillense. “Lo importante es hablar desde el conocimiento y no desde la lejanía”, señaló El Barkani para subrayar los motivos de su invitación.
Es muy improbable que Cecilia Malmström se desplace a Melilla, como es muy probable que conozca la realidad de nuestra ciudad con mucho mayor “conocimiento” del que muchos sospechan.
En cualquier caso, si la comisaria de Interior decidiera sorprender a todos y presentarse en Melilla, ¿qué vería? Probablemente no se conformaría con la visita ‘turística’ al paso de Beni Enzar y con un recorrido rápido por el perímetro fronterizo. Quizá querría tener un cara a cara con el coronel Martín Villaseñor para que éste le aclarara algunas escenas captadas por las cámaras de televisión y fotográficas en los últimos asaltos. Probablemente también quisiera que el máximo responsable de la Comandancia de la Guardia Civil le explicara en qué legislación se han basado algunas de sus decisiones o las que tomaron sus subordinados cuando, como explicó en el juzgado, él se encontraba fuera de la ciudad.
Puede que Malmström también expresara su deseo de hablar con alguna asociación de guardias civiles, en especial con AUGC. Tal vez tuviera intención de conocer de primera mano, a través del testimonio de los agentes, qué está sucediendo en el perímetro fronterizo y qué ven los guardias civiles cuando las Fuerzas de Seguridad marroquíes repelen un intento de asalto.
Es probable que también quisiera hablar con la consejera de Bienestar Social. Quizá pudiera aclarar a María Antonia Garbín sus dudas sobre la aplicación de las leyes a los menores extranjeros no acompañados, sobre la tutela de estos menores y los derechos que asisten a estos niños.
Seguro que también reservaría un tiempo de su visita para intercambiar impresiones con alguna ONG. Puede que también estuviera interesada en conocer cómo realizan su trabajo las asistencias médicas cuando se produce un asalto.
Y finalmente, no abandonaría Melilla sin antes ver qué ocurre en el CETI, ese centro con una capacidad máxima para 480 personas y que en la actualidad acoge a 1.900 de manera constante durante las últimas semanas. La comisaría querría saber cómo es allí el día a día de los casi dos millares de residentes con tal grado de saturación. Muchos de ellos tendrían la oportunidad de contarle su experiencia personal, cómo sobrevivieron en el Gurugú, cómo entraron en Melilla y, sobre todo, por qué intentar escapar de los agentes de la Guardia Civil para correr a refugiarse en la Jefatura Superior de Policía.
¿Y si finalmente viene Cecilia Malmström? ¿Alguien piensa que vendría a hacerse la sueca?
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…