Voluntariado Cristiano y Ciudad firman un convenio de colaboración

  • Está destinado al desarrollo de determinadas actuaciones dirigidas a reclusos, exreclusos y sus familias

La Ciudad Autónoma, a ­través de la Consejería de Bienestar Social, firmó ayer un nuevo convenio de colaboración con la Asociación de Voluntariado ­Cristiano de Prisiones de Melilla con un presupuesto total de 32.130 euros, para el desarrollo de determinadas actuaciones destinadas a reclusos, exreclusos y sus familias.

Gracias a este convenio, la asociación tendrá recursos para llevar a cabo actuaciones de mantenimiento de los pisos de acogida, proyectos y actividades con los reclusos y exreclusos del Centro Penitenciario de Melilla y sus familias, con lo que se pretende mejorar la calidad de vida de este colectivo, así como de sus familiares.

Este programa se desarrolla desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre, con horarios adaptados en función de la ­actividad.

Objetivos del Voluntariado

La Asociación de Voluntariado Cristiano de Prisiones trabaja en diversos campos y comprende diferentes objetivos, como el de acompañar, escuchar y atender la situación y realidad personal, familiar y social de las personas privadas de libertad; y promocionar una mejor convivencia en el centro penitenciario a través de una adecuada gestión del tiempo libre de los reclusos en el centro.

Otro objetivo es procurar la atención religiosa y el desarrollo personal mediante actividades formativas y de habilidades sociales, evitando así la marginación y exclusión social dentro y fuera de la cárcel, usando para ello una serie de actividades para reeducar al preso para cuando recupere su libertad.

La asociación, además, también atiende sus necesidades básicas a la vez que trabaja para favorecer la comunicación entre los reclusos y sus familiares, especialmente menores.

Actividades previstas

Entre las actividades previstas que se desarrollarán por los voluntarios se encuentran el asesoramiento religioso (eucaristía y catequesis), acompañamiento en salidas culturales y deportivas, entrega de ropa y calzado, acompañamiento de niños en bis a bis, entrega de alimentos y un largo etcétera.

Además, cuando un preso recupera su libertad, la asociación también ejerce la tutela del mismo, además de encargarse del mantenimiento de los pisos de acogida para internos con permiso y sus familiares.

Asímismo está prevista la realización de talleres de manualidades, de lectura y de música y la­ ­organización de celebraciones como la Navidad, la Semana Santa y la fiesta de la Merced, patrona de las instituciones penitenciarias.

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