El consejero reconoce que todo es mejorable, pero resalta que tanto ciudadanos como trabajadores reaccionaron muy bien ante el acontecimiento l Asegura que ninguna familia afectada se va a quedar en la calle.
Tres meses después del terremoto, el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, hace balance del intenso trabajo realizado por los responsables de su área en este tiempo. El consejero reconoce que fue una situación imprevista, pero resalta la gran implicación de los trabajadores de la Administración. “Todo se puede mejorar, pero la respuesta fue muy positiva por parte de todos, empezando por los ciudadanos”, resalta.
El 25 de enero, a las 5:22 de la madrugada, la ciudad tembló por un movimiento sísmico de 6.3 grados en la escala de Richter que se registró en el Mar de Alborán. La intensidad fue superior a la del seísmo que el que produjo en Lorca en 2011, aunque afortunadamente las consecuencias no fueron tan graves. La Ciudad tuvo que ponerse a trabajar para dar respuesta a los afectados. Ventura explicó que la coordinación entre su Consejería y los Servicios Técnicos fue total. Esta cooperación fue imprescindible para poder atender a las familias.
En total, Bienestar Social atendió a 51 familias. No obstante, Ventura indica que el número de afectados fue mayor, pero no todos necesitaron la ayuda de su Consejería. El mayor esfuerzo ha sido realojar a los que se quedaron sin casa. Aún hay 18 familias que siguen viviendo en los hoteles que el Ejecutivo local les ofreció mientras hallaban una solución permanente. Ésta ha sido la principal preocupación del consejero, que recalca que la reubicación de estas personas no depende de la Administración sino de las familias y los propietarios de las viviendas que puedan alquilarse. “No vamos a dejar a ninguna familia en la calle”, dejó claro Ventura, para precisar seguidamente que estas personas tienen que ser más activas en la búsqueda de una vivienda para volver a la situación que tenían antes del terremoto. “Siempre habrá algún propietario que quiera alquilarles un piso”, apostilló.
La otra consecuencia de este seísmo ha sido que la Administración ha tenido que hacer un esfuerzo presupuestario. Bienestar Social tiene una partida anual de alrededor de 150.000 euros para alojamientos que casi se ha agotado en estos tres meses. Ahora, Ventura confía en que con las ayudas que está previsto que lleguen del Estado se pueda reponer este gasto, para que la Consejería continúe dando respuesta a las familias que necesiten ser alojadas, no sólo a consecuencia del terremoto, sino también por otras circunstancias.
A la espera de la aprobación de los dos decretos en el Consejo de Ministros, está previsto que Melilla reciba 11,9 millones de euros de ayuda del Gobierno central para hacer frentes a las consecuencias del terremoto del pasado 25 de enero.
Ventura pide a los posibles arrendatarios que tengan “corazón” con los desalojados
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, reconoció que para las familias desalojadas es complicado encontrar una vivienda. Ventura apeló a la buena voluntad de los arrendadores a la hora de confiar en estas familias a pesar de que cuenten con pocos recursos. El consejero dijo que los propietarios deben tener un poco de paciencia para recibir el dinero de las ayudas de la Administración. Explicó que la Consejería va a apoyar a las familias que tengan pocos ingresos, pero indicó que las gestiones para la tramitación de las ayudas se dilatará entre 10 y 15 días, como máximo. Por este motivo, pidió a los arrendadores que confíen en el Gobierno local. Asimismo, insistió en que las familias tienen que esforzarse para encontrar una vivienda, porque la búsqueda de la casa no es una tarea que tenga que hacer la Administración local.
Dos de las 18 familias sin hogar ya tienen propuestas de alquiler
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, indicó que de las 18 familias melillenses que aún están residiendo en los hoteles que ha puesto la Ciudad para acoger a las personas que se quedaron sin hogar tras el terremoto, hay dos que ya han presentado una propuesta de alquiler a los técnicos de su área. Ventura apuntó que espera que estas dos familias puedan estar pronto en sus casas. Eso sí, el consejero de Bienestar Social dejó claro que es imposible predecir cuánto tiempo tardarán en encontrar un hogar las personas que continúan desalojadas, porque se trata de una cuestión que no depende exclusivamente de la Administración, sino sobre todo de los propios afectados y de la disponibilidad de los propietarios de las viviendas y de las inmobiliarias.