Categorías: Sociedad

Unos 200 romeros caminan junto al Simpecado del Rocío

La romería organizada por la Cofradía de Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío contó con menos participación que otros años l La jornada transcurrió sin incidentes.

El despertador sonó muy temprano para ser domingo. Era de madrugada cuando entró en la ducha. Sobre el tocador, un pañuelo azul, el que todos los años se anuda alrededor del cuello para que se vea bien que pertenece al Rocío. Su corazón disfruta de cada instante de este día. Llega a la iglesia y allí le esperan otros rocieros, fieles ‘amantes’ de la Virgen que viste de blanco y luce hermosa como nunca. Una vez que termina la oración, comienza un día de convivencia que todo el mundo debería vivir al menos una vez en la vida. La hermandad prepara un rico desayuno que da las fuerzas necesarias para caminar durante las cuatro horas que tienen por delante estos romeros. El camino se hace con fe, alegría y esperanza.
Este año tan sólo 200 rocieros han acompañado al Simpecado de la Cofradía por las calles de Melilla. Fueron menos que en otras ocasiones y es que el número de fieles que se suma a este camino cambia todos los años. Las circunstancias personales de las familias que tienen por tradición participar en la romería del Rocío hace que muchos de estos romeros no estuvieran ayer orando en esta ‘procesión’.
Hay muchas formas de vivir el camino, pero todas ellas tienen un punto de partida en común: La adoración por la Virgen del Rocío. Algunos rocieros se levantan temprano el domingo de Pentecostés porque es una tradición familiar. Ya sus abuelos participaban en esta romería y no quieren perder la buena costumbre de rezar junto al Simpecado hasta la zona de Rostrogordo. Por este mismo motivo son muchos los pequeños que participan en la romería.
También los jóvenes de Santa María Micaela se implican en esta tradición, pues incluso llevan su propio coche engalanado para realizar este trayecto todos juntos y en corrillo.
Otros romeros, en cambio, hacen este camino como parte de una promesa que le hicieron a la Virgen. Un familiar enfermo que no termina de curarse o un trabajo que no llega son las situaciones que llevan a estos cristianos a rogarle a la Señora del Rocío una solución. Por ello son muchos los que se emocionan mientras van caminando recordando los motivos que les llevan a andar estas cuatro horas.

El ánimo no decae
Para que los pasos no cansen a estos cristanos, las carretas y los coches llevan música rociera todo el camino. Las sevillanas dedicadas a la Virgen son las más frecuentes. También es una forma de orar para los participantes. Las letras de estas canciones son descripciones de los milagros y de las peticiones que se hacen al Rocío. Son una forma de que los romeros no olviden que este camino se hace para honrar a la Señora y no sólo para divertirse.
Bajar la cuesta de Alfonso XIII, recorrer las calles del centro hasta el mercado de abastos y subir por la calle México hasta los Pinares no es un gran sacrificio para quien esté en forma, pero lo cierto es que cuándo los romeros llegan a la altura del Club Divina Providencia, las piernas empiezan a notar las horas de camino. No obstante, la fe da fuerzas y el Espíritu Santo del día de Pentecostés hace que los pies sigan andando casi sin sentirlos hasta Rostrogordo.
En realidad, muchos romeros entienden este camino como una fiesta, una celebración de la fe que tienen en el Rocío. Además, no hay mayor satisfacción para ellos que llegar a los Pinares y abrazarse allí con los familiares que ya han colocado las mesas y las sillas de campo bajo una sombra. En este lugar de Rostrogordo vivirán aún con mayor intensidad la convivencia que la Cofradía del Cautivo organiza todos los años tras la romería.
La jornada de ayer transcurrió sin incidentes. Ningún romero necesitó la asistencia de los sanitarios de Cruz Roja que también forman parte de los participantes de este camino.
Ahora sólo les quedan 364 días para volver a reunirse en Santa María Micaela y vivir de nuevo el camino en honor al Rocío. Mientras que los rocieros esperan la llegada de Pentecostés de 2015, seguirán participando en todas las actividades de la hermandad de Santa María Micaela, porque esta cofradía no sólo organiza la salida de los tronos de Semana Santa y esta romería, sino un gran número de acciones solidarias con las que asiste a muchos ciudadanos que necesitan ayuda.

Compartir

Artículos recientes

Prueba Video Embed DailyMotion

La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…

6 días hace

Los Caleros de Ayamonte de Pepe Gámez

En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…

2 meses hace

Indagando sobre el sentido del temor a la muerte

Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…

2 meses hace

Percebes

De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…

2 meses hace

Derecho a discrepar

Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…

2 meses hace

Verano del tiempo viejo (VII)

Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…

2 meses hace