Los niños del Centro de Educación Especial Reina Sofía lograron movilizar a cientos de melillenses que apoyan las reivindicaciones que eleva la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA).
Más cuidadores, exactamente 13 son los que necesitan para que se sumen a los cinco que ya trabajan en la institución y llegar a 18. Más enfermeras para atender a los 122 alumnos es otra de las peticiones. Ahora solo hay una, que ve sobrepasada por el exceso de trabajo. También requieren dos fisioterapeutas.
Los petitorios pasan por el servicio de transporte y de comedor, este último comenzará el lunes y no lo hizo con el inicio de curso.
Muchas de estas reivindicaciones son viajas, datan desde hace varios años, sin encontrar respuesta en las autoridades.
Quienes se ven perjudicados son 122 niños melillenses que tienen derecho a una educación de calidad. Estas reclamaciones han conseguido eco en la sociedad, que este jueves, se unió a la jornada de protesta que culminó con la lectura de un manifiesto.
“¡Basta ya! Por la dignidad de nuestros hijos”, rezaba la pancarta con las que padres, madres, alumnos y melillenses recorrieron parte del centro de la ciudad para llegar a la plaza España.
Estos niños, como todos en la ciudad, merecen tener una educación de calidad, con los servicios y atenciones que tienen los demás estudiantes del país y a los que hay que garantizárselos.
Hay que recordar que la educación es sinónimo de progreso, ese que necesita Melilla para ser una mejor ciudad, con una sociedad más sensible y con un futuro que está por escribir.