Categorías: Sociedad

Unas quince personas descubren que son diabéticas gracias a Adimel

 La asociación continúa celebrando hoy el Día Mundial de la Diabetes con una fiesta infantil y mañana con una caminata por El Pueblo.

Unas quince personas descubrieron ayer que tienen niveles altos de azúcar en la sangre y por lo tanto, deben acudir a su médico para que les ponga un tratamiento para tratar la diabetes o para retrasar su desarrollo. Estos ciudadanos se acercaron a las mesas que la Asociación de Enfermos de Diabetes (Adimel) y el Ingesa instalaron en varios puntos de la ciudad, como el Mercado Central de Abastos o la plaza Menéndez Pelayo. Tras un leve pinchazo, que asusta más que duele, las enfermeras daban esta mala noticia a estos quince melillenses. Sus niveles de azúcar en sangre eran tan altos que debían ir con urgencia al médico de cabecera. Ya no tenían excusas para no ir a su doctor. Su cara de sorpresa también reflejaba preocupación porque la diabetes es silenciosa, no tiene síntomas en sus primeros estados, y no se estaban dando cuenta de lo peligroso que puede ser para su salud padecer esta enfermedad y no tener un control de los niveles de azúcar en la sangre.
Algunos ciudadanos intentaron justificar que esas cifras elevadas se debían a que habían desayunado, pero las enfermeras les insistieron en que unas tostadas o un dulce no provoca esas subidas tan altas. De todas formas, estos ciudadanos regresaron a sus casas con esta recomendación en el bolsillo. Ésta fue una de las principales actividades con las que Melilla celebró ayer el día Mundial de la Diabetes.
Las enfermeras también realizaron análisis a las personas que sufren diabetes o que están tomando unas pastillas para controlar que el azúcar no sea tan elevada. En algunos casos, estaba bien controlada, pero en otros, las sanitarios recomendaron a estos ‘pacientes’ acudir de nuevo al médico para que les cambie el tratamiento.
Unos 600 melillenses se acercaran a estas mesas para hacerse la prueba de glucemia en la sangre, algo curioso porque hay que pinchar la yema del dedo. Pero las enfermeras aseguraron a El Faro que los ciudadanos saben que es un pinchazo muy pequeño y como no se ve la aguja, no le tienen miedo a este análisis.
Por otro lado, la presidenta de Adimel, Pilar Avellaneda, fue la encargada de leer un breve manifiesto en el que se reivindicaba que no haya diferencias entre autonomías a la hora de atender a las personas con diabetes, que se elimine la discriminación que sufren los escolares con diabetes en las escuelas y que haya más recursos para los enfermos y sus familias.
Avellaneda también indicó que son necesarios más programas de formación para los pacientes con diabetes y que deben ser ellos los que pidan a las autoridades sanitarias estos talleres. Asimismo, señaló que es preciso continuar con campañas de prevención de la diabetes y de control de la obesidad, además de aumentar la financiación para la investigación de esta enfermedad.
En la lectura del manifiesto estuvo el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, el director territorial del Ingesa, Francisco Robles y otros miembros del Ejecutivo local que también se prestaron a realizarse el control de azúcar en sangre.
Por su parte, la viceconsejera de Sanidad, María Ángeles Gras, apuntó que la Ciudad siempre apoyará todas las iniciativas que desarrolle Adimel para mejorar la atención y la formación de los ciudadanos con diabetes.
También el viceconsejero de Bienestar Social y Sanidad, Hassan Driss, recordó que Adimel ha recibido unos 15.000 euros para el desarrollo de actividades, como la campaña del Día Mundial de la Diabetes y otros cursos de formación para niños y jóvenes.

Venta de camisetas
Los voluntarios de Adimel que acompañaron a las enfermeras repartieron por su lado lazos de color azul, el símbolo de la diabetes a todos los que se realizaban este control. Además, vendieron camisetas, unas prendas que llevarán mañana para la caminata organizada por El Pueblo. Este año el lema de la camiseta era ‘Una alimentación saludable comienza con un buen desayuno’. Las camisetas se volverán a poner a la venta en la puerta del  Club Marítimo antes de la caminata por 5 euros.
Hoy continuará la celebración del Día Mundial de la Diabetes con una fiesta infantil en San Lorenzo a partir de las 17:30 horas.

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