Melilla y el conjunto de España se enfrentan desde hoy a un largo trimestre que marca el inicio del calendario laboral. Los estudiantes y escolares vuelven a las aulas y la tarea por realizar, mucha en muy diversos ámbitos, se acumula en los despachos de políticos y nuevos cargos de Gobierno.
Para inaugurar este nuevo año, en lo que ya es una cuenta atrás hasta lograr la multitud de objetivos que como ciudad nos hemos propuesto, publicamos una entrevista con el presidente Juan José Imbroda, en la que la primera autoridad local analiza nuestras perspectivas de futuro, con un mensaje de optimismo y esperanza.
El Gobierno de la Ciudad lo tiene claro: todas las prioridades deben ir encaminadas a conseguir, como mínimo, reducir a la mitad el alto índice de paro que sufre Melilla y que nos sitúa en una tasa de casi el 24%, a pesar del trabajo temporal que se crea con los Planes de Empleo.
La economía acaba determinando todos los órdenes de nuestra vida y es la que mide finalmente qué tipo de política es la que prevalece. En Melilla, es evidente que nuestro desarrollo pasa por encontrar alternativas económicas que nos ayuden a crecer como ciudad pero también como pueblo, en un sentido cada vez más igualitario.
Juan José Imbroda comparte esta perspectiva y por eso dice también que vivimos una “revolución lenta pero silenciosa”, que busca la mayor igualdad efectiva entre todos los melillenses. Con ese objetivo iniciamos un año, a priori tan crucial como toda la nueva legislatura, llamada a ser definitiva para el mejor desarrollo de Melilla.