Un Melilla agridulce sigue la estela de los mejores

El cuadro del FC Cartagena ha sido el equipo másbeneficiado de la jornada en la que el conjunto melillense desaprovechó una oportunidad de oro para resarcirse de la derrota del miércoles.

La escuadra azulina demostró su personalidad en un buen primer tiempo y mientras el rival se mantuvo en igualdad numérica sobre el rectángulo de juego del Municipal de San Pablo, pero, cuando mejor pintaban las cosas, los norteafricanos dieron la de arena frente a un Écija que se creció ante la adversidad y que, a fuerza de garra y tesón, plantó cara e incluso superó a un anodino Melilla al que, como diría el ínclito Cano, se le apagó la luz en una segunda mitad para olvidar.
Menos mal que con tres jugadores más sobre el campo, César Díaz maquilló la que hubiera sido una derrota sonrojante que hubiera dado al traste casi de manera definitiva con la ilusión que el equipo trasmitía hasta hace dos jornadas. No todo puede valorarse de manera negativa porque, al margen del importante punto sumado frente a un rival directo como es el equipo astigitano, se produjo un hecho que no puede pasar desapercibido y que hay que colocar en el haber de Juan Moya. Y es que San Pablo siempre estará en la mente del canterano Borja López, ya que el municipal ecijano fue el escenario donde el melillense, todavía en edad juvenil, debutó en la categoría de bronce del fútbol español.
Ahora, una vez superada una semana atípica e intensa en la que la escuadra unionista afrontó tres partidos de competición, toca volver a la senda de la regularidad para recuperar la línea de juego que ha llevado al equipo de Juan Moya hasta la zona alta de la clasificación y mantener, al menos, la posibilidad de llegar al tramo decisivo de la Liga con opciones de pelear por acabar entre los mejores.
Para el próximo choque, Moya podrá contar con Jairo Álvarez y Velasco, dos hombres importantes en los esquemas del técnico melillense que el domingo tuvieron que quedarse en casa, ambos castigados por el Juez de Competición con un partido de sanción.
La igualdad existente en el Grupo IV así como la irregularidad mostrada por los equipos que ocupan o han ocupado los puestos nobles de la tabla, hace que cada vez sea más trascendental mantener una línea regular de juego para alcanzar una de las posiciones de privilegio y mantenerse varias jornadas en ellas. Hecho harto complicado en lo que llevamos de Liga, salvo la excepción del Real Jaén, único equipo que ha mantenido el tipo en las veinticuatro jornadas que se llevan disputadas y que, precisamente en ésta última, encajó la cuarta de la temporada en su visita al Carlos Belmonte frente a un Albacete Balompié que vuelve a copar uno de esos puestos tan ansiados.
El vaivén continuo en el grupo de cabeza deja entrever que la lucha será encarnizada entre los equipos que partieron a finales de agosto con el objetivo de disputar las eliminatorias de ascenso, al igual que los que se han sumado en el camino como el CD San Fernando o el Almería B que, después de estar mucho tiempo perdidos en la zona baja, se asoman con fuerza y energía renovada a los primeros puestos, caso de la Balompédica Linense, Écija Balompié, Cacereño o Lucena CF, próximo rival que visitará el Municipal Álvarez Claro y ante el que la UD Melilla no puede fallar de ninguna manera.
Por último, el Lucena de Falete se impuso a La Roda y se coloca en la tabla igualado con el Melilla con 36 puntos. El conjunto aracelitano llegará a nuestra ciudad con la moral por las nubes tras completar un excelente último tramo liguero que lo ha situado a tiro de piedra del tercer y cuarto puesto. Los azulinos no pueden fallar frente a un rival que tuvo la suerte de cara en el partido de la primera vuelta en el que se alzó con la victoria por un gol a cero y que saltará al césped del Álvarez Claro con la intención de sumar los tres puntos en juego. Los melillenses si quieren seguir metidos en los puestos altos de la clasificación general, no se pueden permitir el lujo de dejar escapar los tres puntos ante los lucentinos.

El Albacete se deshizo en un partido muy serio de los de Antonio Gómez del que hasta ahora ha sido un líder sólido, pero que en las últimas jornadas no termina de recuperar el acierto rematador que tuvo durante buena parte del campeonato. Por el contrario, los manchegos rompen la racha negativa en la que estaban inmersos y se sitúan en una posición más acorde con su potencial y su objetivo.
Por su parte, el CD San Fernando cayó de manera justa en El Mayayo frente a un UCAM Murcia, que fue capaz de superar un marcador adverso y sumar su tercer triunfo consecutivo en a penas ocho días. El conjunto universitario ha sumado en lo que llevamos de segunda vuelta los mismos puntos que había sumado en toda la primera ronda del campeonato, por lo que el milagro se atisba en el horizonte del cuadro católico. Los de García Tevenet, que han estado prácticamente hasta esta jornada ocupando el farolillo rojo del Grupo, dejan el testigo al Betis B de Óscar Cano que ayer volvió a caer en su feudo ante el Villanovense, un rival directo en la pugna por mantener la categoría. El Cádiz empieza a ver más claro el panorama al alejarse de la zona de descenso de la que se distancia ya en cuatro puntos, después de ganar en el Municipal de Lepe frente a un equipo venido a menos como el CD San Roque, a pesar de contar con técnico nuevo en el banquillo. Mientras , el Atlético Sanluqueño se deshizo con facilidad de un Arroyo que nada pudo hacer ante el vendaval verdiblanco, que dirige el que fuera técnico azulino Pedro Buenaventura.

El Sevilla Atlético sigue de capa caída y se acomoda en la zona peligrosa tras caer derrotado en el Municipal de La Línea frente a los de Rafael Escobar que cada vez se parece más al equipo que la pasada temporada estuvo a punto de dar la sorpresa en las eliminatorias de ascenso a Segunda División A. El Almería B, con bajas importantes en el equipo, pero con los ex azulinos Édgar y Raúl García en el once titular, arañó un valioso empate en un campo complicado como el Príncipe Felipe de Cáceres.

El Sevilla Atlético sigue de capa caída y se acomoda en la zona peligrosa tras caer derrotado en el Municipal de La Línea frente a los de Rafael Escobar que cada vez se parece más al equipo que la pasada temporada estuvo a punto de dar la sorpresa en las eliminatorias de ascenso a Segunda División A y que está siendo uno de los serios favoritos para lograr el ascenso. El Almería B, con bajas importantes en el equipo, pero con los ex azulinos Édgar y Raúl García en el once titular, arañó un valioso empate en un campo complicado como el Príncipe Felipe de Cáceres. El único gol del conjunto almeriense fue obra de Chumbi, uno de los asiduos a las convocatorias del primer equipo.