Un grupo de madres ha formado la plataforma Transparencia Educativa de Melilla (TEM) para defender los derechos de los padres a decidir qué tipo de educación quieren para sus hijos en el colegio. La plataforma, además, ha convocado una manifestación para este viernes destinada a reivindicar el pin parental en los centros. La marcha se desarrollará a partir de las cinco y media de la tarde desde la Plaza de España hasta Menéndez Pelayo, donde se leerá el correspondiente manifiesto.
Estas madres quieren que se aplique lo que se llama ‘pin parental’, en concreto un documento de consentimiento o no para la realización de determinadas actividades, como los talleres LGTBI. “Son actividades que están un poco en controversia en relación con la moralidad de las personas y la forma de educar de cada padre”, señala al respecto la promotora de la plataforma, Verónica Guerrero.
Después de dejar claro que TEM no tiene orientación política ni religiosa (“simplemente somos un grupo de madres que nos reunimos para defender a nuestros hijos”), Guerrero manifestó que estos padres “estamos en el derecho” de pedir el pin parental, un documento que debe existir en cada uno de los colegios melillenses “pero que en algunos no se ha permitido presentarlo”. “El pin parental lo que hace es ayudar a los padres a dar o no su consentimiento a las actividades que se proponen para nuestros hijos”.
El documento en cuestión “no resuelve nada” a los profesores sino a los niños. “Si están expuestos a ese tipo de talleres puede ser perjudicial para ellos a corto y largo plazo. Al profesorado no le influye en nada. Es un documento que se presenta en Secretaría y allí se firma por parte de los padres para que sus hijos no hagan esas actividades, talleres o lecturas”, explicó.
Verónica Guerrero defiende la libertad de las familias a la hora de decidir qué tipo de educación se debe inculcar a sus hijos. “Es un documento que si se quiere se usa y si no, pues nada. Eso es problema de cada familia”, señaló para añadir que sería conveniente que los colegios informaran de la existencia de esa posibilidad a todos los padres. “Sería ideal que los centros educativos dieran información sobre esto”, dijo recordando, además, la polémica que se suscitó hace unos meses entre un taller de igualdad impartido por el colegio León Solá y la Comisión Islámica. “Allí se hicieron unos talleres y los padres no estaban contentos”.
Esta nueva plataforma melillense hace más de un año mandó unos correos electrónicos al Ministerio de Educación para recabar información sobre todas estas cuestiones. Sin embargo, siguen esperando contestación. “Llevamos un año esperando que los respondan”, aseguró.
Finalmente, Verónica Guerrero dejó claro que la TEM no está vinculada a partidos políticos ni creencias religiosas. “Somos un grupo de madres que nos basamos simple y llanamente en nuestra ley natural, y que como padres y tutores decidimos lo que tienen o no que dar en los colegios”, concluyó.
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