Unos 120 mayores del Centro Asistencial se beneficiarán de la solidaridad demostrada por la Casa de Melilla en Madrid, que ha destinado 1.150 euros para la compra de una grúa cambiapañales.
Melillenses que viven en Madrid son los creadores de una iniciativa solidaria que beneficiará a 120 mayores que residen en el Centro Asistencial de la ciudad. Con parte de los beneficios de la venta de la lotería de Navidad realizada por la Casa de Melilla en Madrid, esta entidad ha destinado 1.150 euros para la compra de un aparato que facilitará la vida de todos los mayores que viven en este centro, una grúa cambiapañales.
La consejera de Bienestar Social y Sanidad, María Antonia Garbín, agradeció desde el Centro Asistencial, como componente de la Junta de esta entidad, que al Casa de Melilla en Madrid haya donado dinero para la compra de este aparato. Así, destacó la importancia de este gesto no sólo por el importe que han donado, sino porque “estos melillenses de Madrid se hayan acordado del Centro Asistencial y de sus mayores”.
El delegado en Melilla de esta entidad, Paco Casaña, comentó que se trata de una iniciativa que se enmarca en la nueva andadura de esta casa regional, que se constituyó hace a penas un año. Así, apuntó que “ha nacido con una gran vocación de melillismo, no solamente de aunar a todos los melillenses que viven o pasan por Madrid para ayudarles en todas las cuestiones que precisen, sino en colaborar con nuestra ciudad en todas las cosas que se nos pida y que podamos hacer dentro de nuestras posibilidades”. Y por ello, destacó la colaboración que han realizado con “una entidad que es tan generosa y piadosa como ésta” y en la que a través de unos donativos se puede mejorar la vida de sus residentes.
El delegado de la Casa de Melilla en Madrid indicó que el dinero se consiguió a través de la venta de participaciones de lotería de Navidad, que también se pudieron encontrar en los restaurantes Miguel Benítez, La Chozas, Juanito y la Muralla.
“Agradecemos el apoyo a los melillenses tanto de aquí como de Madrid, para los que estamos y ofrecemos todos nuestros servicios”, señaló Casaña.
Ser solidarios
Este proyecto surge porque dentro de los estatuos de la Casa de Melilla en Madrid se anima a organizar actos con los que sacar recursos y ayudar a todas las entidades que lo necesitan y que ayudan a su vez a los ciudadanos en Melilla.
Casaña comentó que no sólo se vende lotería, sino que se organizan comidas, reuniones e incluso viajes para este fin. Pues destinan una parte a actos como estos para “echar una mano a nuestros conciudadanos y contribuir con un granito de arena para que Melilla sea más grande, más humana y como reza su eslogan, más generosa. En definitiva, para hacerla mejor”. aseguró.
No obstante, insistió en que los melillenses deben saber que en Madrid tienen una casa con la que pueden contar siempre que precisen cualquier cosa o deseen realizar una gestión.
El presupuesto que ha aportado la Casa de Melilla en Madrid para la compra de este aparato ha sido de unos 1.150 euros, aunque Casaña explicó que el Centro ha añadido una pequeña cantidad para completar la compra.
La elección del Centro Asistencial se realizó porque es de las instituciones más antiguas y de las que hacen una labor más más difíciles y bonitas, según indicó Casaña, como es “acoger a los niños que acaban de nacer y están casi abandonados y a los ancianos que no tienen otros recursos y que son tratados con altísima dignidad”.
Una colaboración continua
La consejera aseguró que poco a poco se irán sustituyendo las otras grúas cambiapañales y que aunque el Centro Asistencial no depende de la Ciudad, se incluirá de nuevo en los presupuestos del Gobierno local. De esta forma, Garbín indicó que no saben la cuantía que recibirán este año aunque hay plazas que están concertadas con el Imserso. No obstante, apuntó que el pasado año se invirtieron 3.400.000 euros y que la Ciudad tiene una la implicación del 100% con este centro.
También comento que con la incorporación de una Escuela Infantil en este centro se completa la red asistencial y de servicios sociales de la ciudad.
Por otro lado, Garbín indicó que los puestos que dejaron libres con su marcha las Hijas de la Caridad ya fueron repuestos por personal de este centro. Así, explicó que las hermanas contaban con papeles fundamentales en el Centro Asistencial como intendencia y cocina, pero que fueron reasignados cuando dejaron la ciudad.
Así, es el gerente quien se hace cargo de las laboras de intendencia y en el pabellón de niños que lo llevaba una hermana, ahora es labor de un director que se ha contratado. Las demás tareas se fueron reasignando al personal del centro, apuntó Garbín, incluso el puesto que ocupaba una de las Hijas de la Caridad que era enfermera.
La consejera aseguró que las Hijas de la Caridad “serán siempre insustituibles en este centro por la historia y la gran labor que han hecho en este lugar cuando no había infraestructuras ni medios y donde trabajaban las 24 horas al día”.