El sindicato señala que se producirá una pérdida de poder adquisitivo de esta renta. El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha perdido en cuatro años 5,5 puntos de su capacidad adquisitiva, señala en una nota de prensa Maite Molina, secretaria de Acción Sindical de UGT en Melilla. Recuerda que desde 2007 ha ido perdiendo peso sobre el salario medio, alejándose del compromiso suscrito por España en la Carta Social Europea de que el SMI alcance del 60% del salario medio.
Por este motivo, Molina se muestra contraria al borrador del proyecto de real decreto por el que se fija este salario mínimo para el próximo año. La secretaria de Acción Sindical critica que el Gobierno se proponga congelar el SMI para el próximo año, “lo que supondrá una nueva pérdida de poder de compra de esta renta”.
Molina recuerda que España tiene uno de los salarios mínimos más bajos de la Unión Europea de los 15. También subraya que nuestro país bordea el umbral de la pobreza en hogares con un solo miembro y se sitúa por debajo en hogares compuestos por al menos dos personas.
Por todos estos motivos, la dirigente sindicalista considera que es necesario que se produzca una recuperación progresiva y modulada del poder adquisitivo del salario mínimo. Además, defiende la necesidad de reformar el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores para evitar que continúe descendiendo el poder de compra del SMI.
Finalmente, Molina critica el acelerado proceso de consulta, ya que el jueves UGT recibió el borrador y la respuesta debía darla el sindicato a nivel confederal a las 9.30 horas del viernes, cuando estaba prevista la aprobación del real decreto en el Consejo de Ministros. “Estas son las formas de actuar por parte del Gobierno de Rajoy, el que mayor daño está haciendo a los trabajadores de este país”, afirma el UGT en su comunicado.