Tres días en huelga de hambre

Los manifestantes sirios del CETI enviaron ayer un escrito a la Dirección del CETI preguntando en qué punto están sus trámites para salir de Melilla l Desde el centro les recomiendan que pidan asilo.

Alalo Kahaled llegó a Melilla hace seis meses. “Tengo la sensación de que no me entienden. Lo que quiero es seguir mi camino”. Su destino, al igual que el del resto de residentes en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) que hoy llegan al tercer día de huelga de hambre, es vivir en Alemania, pero se han se encontrado con un obstáculo en su camino: no han pedido asilo.
Tal y como publicó ayer El Faro, la protesta responde a que quieren saber en qué punto se encuentra su procedimiento de salida del centro y dicen no comprender por qué otros refugiados que sí piden asilo llegan a Melilla y dejan el CETI en poco tiempo. Para tener este dato, mandaron un escrito a la Dirección del centro preguntándolo.
Alalo cuenta que si no quieren solicitar este derecho en la ciudad es para evitar que si llegan a Alemania y solicitan allí este tipo de protección, se la nieguen y tengan que volver a España. Es lo que se conoce como Tratado de Dublín, que indica que un refugiado debe permanecer en el primer país de la Unión Europea (UE) al que llega.
Se trata de una protesta que empezó el lunes una única persona y a la que se han sumado ya 13 residentes en la misma condición legal.  
En la conversación que mantuvo Alalo ayer con El Faro, se percibía la indignación en su tono de voz. Reivindica que viene de un lugar donde está viviendo una situación muy cruda, la guerra de Siria, y lamenta que lo que quiere es llegar a Alemania, establecerse allí, con sus abuelos, y poder hacer que su mujer salga de su país y se reúna con él.
Al enterarse por medio de José Palazón, líder de la ONG Pro Derechos de la Infancia (Prodein) que, según la Ley de Extranjería, puede llegar a estar años en el centro si no pide asilo, se pregunta dónde está la justicia.

Rutas y mafias
Por otra parte, otro de los huelguistas que se concentraron ayer frente al CETI comenta que pagó unos 1.000 euros a una organización para que le facilitaran la llegada a Melilla por la conocida como ruta terrestre.
Asegura que eligió esta vía porque, por lo que sabía, era más segura y menos costosa que la marítima, que eligen otros refugiados para llegar a la UE.
Además, cuenta que estuvo un mes en la provincia de Nador intentando entrar en Melilla por la frontera de Beni Enzar, pero las autoridades marroquíes le impedían la entrada.
Muestra vídeos de su ciudad natal, imágenes de casas destruidas, y se pregunta por qué viniendo de un panorama como ése tiene que pasar meses y meses esperando en el CETI.

Pedir asilo para salir con rapidez

Ante la protesta iniciada hace ya tres días por este grupo de sirios, desde el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) aseguraron a El Faro que, ante casos como éste, siempre les recomiendan que pidan asilo y cuentan que ha habido casos de refugiados que han salido del centro en una o dos semanas.
Además, aseguran que sólo la Policía Nacional sabe en qué punto se encuentran sus expedientes, por lo que no puede responder a su pregunta enviada por medio de un escrito.
Además, desde el CETI también apuntan que se trata del mismo grupo de sirios que ya se manifestaron en la Plaza de España, un grupo de varones sin cargas familiares y que se niegan en rotundo a pedir asilo.