Tres detenidos en Melilla al caer la red más importante de envío de terroristas a Siria

 La operación realizada entre España, Marruecos y el FBI se salda con el arresto del cabecilla, Mustafá Maya Amaya en La Cañada l Hay otros dos franceses detenidos en la ciudad; un tunecino en Málaga y tres marroquíes en su país (Larui).

Hasta ahora parecía que la captación de yihadistas era algo que sólo pasaba en la ciudad de Ceuta. Sin embargo, tres hombres, Mustafá Maya Amaya, Paul Cadic y Farik Cheikh, fueron detenidos ayer en el barrio de La Cañada de Hidum de Melilla por pertenecer a una red internacional que reclutaba voluntarios para enviarlos a la yihad (guerra santa) en Siria y Mali.
Se trata, según el Ministerio del Interior, de la operación “más importante” contra la captación de ‘combatientes’ para colaborar con tres organizaciones terroristas del entorno de Al Qaeda: Estado Islámico de Irak y Levante (ISIL), Jabhat Al Nusra (JN) y Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
Estos voluntarios suelen integrarse como dirigentes o participar activamente en atentados y ejecuciones públicas. Incluso, alguno ha fallecido en zonas de conflicto. Desde Interior también les achacan crímenes de guerra tales como “asesinatos de población civil” y secuestro de periodistas y personal extranjero dedicado a la ayuda humanitaria internacional.

El “principal dinamizador”
Entre los tres detenidos en Melilla está el cabecilla de la trama, Mustafá Maya Amaya, a quien el Ministerio del Interior define como “el principal dinamizador de la red”. Aparte han sido arrestadas otras tres personas en Marruecos (en la localidad de Larui, a 30 kilómetros de Melilla) y un ciudadano tunecino en Málaga. Éste último se ocupaba de facilitar la documentación falsificada y en su historial aparece que fue detenido el 24 de febrero de 2006 por pertenencia a organización terrorista.
El cerebro de la red desarticulada ayer, Mustafá Maya Amaya, que padece una discapacidad y se mueve en silla de ruedas, captaba “personalmente” a voluntarios yihadistas por Internet desde su casa en La Cañada de Hidum.  Él los escogía y les proporcionaba los contactos necesarios para que pudieran llegar a su destino: Siria o a Mali. También les facilitaba billetes de avión, alojamiento en el lugar de destino, contactos en la zona y una vez allí, les enviaba dinero recaudado en Europa.
En el momento en que lo detuvieron, los agentes también arrestaron en su domicilio a dos ciudadanos franceses (Paul Cadic y Farik Cheikh) que estaban a la espera de partir hacia Siria a hacer la guerra santa.
Todos los detenidos, tanto en Melilla como en Málaga y Marruecos colaboraban de distinta forma con la red de captación de los ‘talibanes’ europeos, que luego eran entrenados y enviados a la yihad. Algunos de ellos ya habían retornado de zonas en conflicto.

Ramificación internacional
Esta organización internacional desarticulada ayer tenía ramificaciones en Marruecos, Bélgica, Francia, Túnez, Turquía, Libia, Mali, Indonesia y Siria.
En la operación, que se ha saldado con siete detenidos en Melilla (3), Málaga (1) y Marruecos (3), han colaborado la Comisaría General de Información de la Policía española, los Servicios de Seguridad marroquíes, agentes de la Oficina Federal de Investigación de los Estados Unidos (FBI) y del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Desde Interior destacan que es la primera vez que agentes españoles y marroquíes participan juntos en el ámbito operativo de la lucha antiterrorista. Hasta tal punto han colaborado que las detenciones en Larui (Marruecos) se han producido de manera simultánea a las realizadas en Melilla y Málaga.
Desde Interior aseguran que la operación, que sigue abierta, ha sido “un duro golpe” a las redes de envío de yihadistas ya que han caído el captador de los terroristas, el falsificador de pasaportes, los encargados de la logística y los activistas que iban a ser enviados a participar en la guerra santa.

Cuatro registros en Melilla y Málaga

Agentes de la Comisaría general de Información de la Policía española llevó ayer a cabo cuatro registros en Melilla y Málaga en el marco de una operación contra el terrorismo islamista. Al menos uno de estos registros tuvo lugar en la casa del “principal dinamizador” de la red, Mustafá Maya Amaya, en La Cañada de Hidum adonde se desplazó una ambulancia, además de coches patrullas y un helicóptero. Según el vídeo facilitado por el Ministerio del Interior, los agentes entraron en la casa del cerebro de la organización que captaba yihadistas para Siria y Mali cuando aún no había amanecido. Dentro de la vivienda hallaron a tres hombres. Dos de ellos estaban tendidos en el suelo sobre alfombras y sin camisa. En la mesa de la habitación donde se encontraban alojados había un libro que podría ser el Corán, tablets y un ordenador. También una pistola, con su cargador.
Los detenidos en la casa de Mustafá Maya Amaya son los ciudadanos franceses Paul Cadic y Farik Cheikh, que se encontraban a la espera de desplazarse a Siria. Uno de ellos (Paul Cadic) tiene barba y un tatuaje bastante grande sobre el pecho, a la altura del corazón.
En Málaga, por su parte, los registros fueron practicados en la casa de un ciudadano tunecino llamado Chafik Jalel Ben Amara Elmedjeri y en dos restaurantes de su propiedad.
A la vez que se producían los registros en Melilla, también se llevaban a cabo, de manera simultánea, en Marruecos. En el país vecino fueron detenidos Tarik Ahnin, Soufian el Moumni y Mohamed Karraz.
Interior considera que la operación de ayer es un “duro golpe” a las redes de envío de yihadistas hacia las organizaciones terroristas desplegadas en las zonas en conflicto.

Las claves

¿Qué?
Golpe a las redes de captación de yihadistas
Agentes de la Comisaría General de Información de la Policía española, los Servicios de Seguridad de Marruecos y el FBI han detenido a siete personas en el marco de una operación antiterrorista.
¿Cuántos?
Hay siete detenidos: Tres de ellos en Melilla
Siete personas han sido detenidas ayer en el marco de una operación policial contra el terrorismo yihadista. Tres de ellas en Melilla, otras tres en Marruecos y una en Málaga.
¿Dónde?
En La Cañada, Málaga y en Larui, a 30 km de Melilla
Tres detenciones se produjeron ayer en el barrio melillense de La Cañada de Hidum. Otra en Las Delicias, de Málaga y simultáneamente, otras tres en la localidad marroquí de Larui, a 30 kilómetros de Melilla.
¿Por qué?
Captaban yihadistas para enviarlos a Siria y Mali
En Melilla hay tres detenidos. Uno de ellos es Mustafá Maya Amaya, considerado “el principal dinamizador” de la red que captaba voluntarios para enviarlos a países en conflicto, donde colaboraban con organizaciones cercanas al entorno de Al Qaeda. Los otros dos detenidos en Melilla son ciudadanos franceses que estaban a la espera de partir hacia Siria. El detenido en Málaga es un tunecino que les facilitaba los pasaportes falsos.
¿Quiénes?
Policía española, marroquí y el FBI estadounidense
En la operación policial antiterrorista que permanece abierta han participado agentes de la Comisaría General de Información de la Policía española, de los Servicios de Seguridad marroquí y del FBI americano.

Interior asesta un “duro golpe” a la célula yihadista “más activa” de España y la UE

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró ayer que la red de captación de yihadistas desarticulada ayer en Melilla, Málaga y Marruecos, era las “más importante activa” de  España y “una de las más activas e importantes de Europa en estos momentos”.
De hecho, Fernández Díaz considera que la operación policial llevada a cabo ayer simultáneamente en La Cañada de Hidum, el barrio malagueño de Las Delicias y la localidad marroquí de Larui ha sido un “duro golpe” a la captación de voluntarios para alistarse en organizaciones terroristas en sintonía con Al Qaeda, como son el Estado Islámico de Irak y Levante (ISIL), Jabhat Al Nusra (JN) y Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
Y lo dice partiendo de que en las tres redadas policiales llevadas a cabo en Melilla, Málaga y Marruecos fueron detenidos siete personajes clave en el funcionamiento de la red: En Melilla cayeron el hombre que captaba a los yihadistas (Mustafá Maya Amaya) y dos de los activistas que iban a viajar a Siria. En Málaga, el sujeto que les facilitaba los pasaportes falsos y en Marruecos, los hombres que daban apoyo logístico a los futuros combatientes de la yihad (guerra santa).

Trasladados a Madrid
Los tres hombres detenidos en Melilla (Mustafá Maya Amaya, Paul Cadic y Farik Cheikh) fueron trasladados ayer mismo desde la ciudad hacia Madrid donde la Audiencia Nacional se encargará de continuar con las investigaciones.
Maya Amaya, Cadic y Cheikh permanecieron alrededor de cinco horas en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Melilla, donde fue desplegado un amplio dispositivo de seguridad. A las seis de la tarde, los tres fueron trasladados al aeropuerto local. Junto con los detenidos también ha sido enviada a Madrid toda la documentación incautada en los registros.
Con la información que recaben las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas y marroquíes de los ordenadores, documentos y ‘tablets’ decomisados en los registros practicados en Melilla, Málaga y Marruecos, Interior tiene previsto solicitar órdenes internacionales de detención contra otros miembros de la red que están residiendo fuera de España y que continúan actualmente con sus actividades delictivas.

Una operación policial que empezó en el año 2010

La investigación que desencadenó ayer la operación policial,  que se saldó con siete detenidos en Melilla, Málaga y Marruecos, se inició en 2010, bajo la supervisión del titular del Juzgado Central de Instrucción número dos de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno. A este juez se le conoce por investigar delitos relacionados con narcotráfico y terrorismo. Últimamente ha sido noticia por enviar un cuestionario de 48 preguntas al expresidente chino Hu Jintao por supuestos actos represivos cometidos en el Tíbet o por citar a declarar a los verificadores internacionales del proceso de desarme de ETA.
Según el Ministerio del Interior, las detenciones de los miembros de una red yihadista, efectuadas ayer en Melilla, Málaga y Marruecos, se aceleraron cuando los agentes encargados de las pesquisas detectaron que el cabecilla de la red de captación de ‘muyaidines’, Mustafá Maya Amaya, tenía alojados en su casa a varios combatientes voluntarios venidos de Francia, a los que había seleccionado previamente y a quienes se disponía preparar para su marcha a Siria.
Esta situación aceleró la detención de Maya Amaya y de dos personas de nacionalidad francesa que estaban en su casa.
En el transcurso de los registros en el domicilio de Maya Amaya en La Cañada, los agentes se incautaron de material informático y documentación pendiente de analizar.

El origen
Una investigación que empezó en el año 2010
La operación que se ha saldado con siete detenidos (tres en Melilla, tres en Marruecos y una en Málaga) se inició en 2010 bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción Número dos de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno. Se trata de un juez conocido por llevar temas sobre todo de narcotráfico y terrorismo.
Las circunstancias
Las investigaciones toman un “impulso definitivo”
La investigación policial tomó “un impulso definitivo” cuando la Policía Nacional detectó que en la casa del cabecilla de la red, Mustafá Maya Amaya, se alojaban dos activistas que se estaban preparando para marchar a la guerra de Siria.
La importancia
Una de las redes claves en España y en toda Europa
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró ayer que la red de captación de yihadistas, desarticulada en Melilla, Málaga y Marruecos es “la más importante y activa” de España y “una de las más importantes y activas de Europa”. Además celebra que en el marco de la operación policial hallan caído piezas claves del engranaje de esta organización: Entre ellas el cabecilla, que fue detenido en La Cañada, Mustafá Maya Amaya.
Las consecuencias
Se emitirán órdenes de detención internacionales
Con la información que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad recaben de los registros practicados en Melilla, Málaga y Marruecos, Interior procederá a la solicitud de órdenes internacionales de detención de otros miembros de la red ubicados en terceros países y que continúan en activo.