Tres calles de Melilla para tres periodistas que marcaron el siglo XX de la ciudad

Los familiares de José Mingorance y Ángel Morán y el propio Francisco Roldán descubrieron las placas en varios viales de Huerta Salama acompañados del presidente Juan José Imbroda.

Tres de los periodistas más insignes de la ciudad ya tienen sus calles. En la mañana de ayer, el viento no logró echar al traste un momento tan emocionante para los familiares de José Mingorance y Ángel Morán, así como para el propio Francisco Roldán, que fueron los encargados de descubrir las placas en los viales que llevan ahora su nombre en el barrio de Huerta Salama. Fueron momentos muy emotivos para todos ellos, quienes estuvieron acompañados del presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, la consejera Simi Chocrón, el presidente de la Asociación de la Prensa de Melilla (APM), Javier Calderón, el de la Asociación de Estudios Melillenses (AEM), Benito Gallardo, y en representación de la Asociación de la Prensa Deportiva Melillense (APDM), Antonio Calderay.
Fue esta última entidad la que propuso la calle para Francisco Roldán, quien ha sido colaborador de El Faro de Melilla y que el año pasado recibió el Escudo de Oro de la Asociación de la Prensa de Melilla (APM). El presidente Imbroda afirmó que Roldán es “el testimonio vivo” de toda una época en la que los profesionales de la información en la ciudad “trabajaban en condiciones muy precarias”. “Paco Roldán es un exponente de esa generación de periodistas que trabajaron por la ciudad y es una persona muy querida por todos”, apostilló el mandatario autonómico. Por su parte, Roldán, visiblemente emocionado, reconoció que durante su vida profesional se ha caracterizado por tener la “lengua larga, pero porque no me callaba nada, no por otra cosa”. Recordó aquellos tiempos en los que se hacía periodismo “de calle, recorriendo los rincones de la ciudad” y que ahora se está perdiendo ese espíritu. Por ello, a los periodistas allí presentes les animó a seguir “luchando por el periodismo, que es la profesión más ingrata y desagradecida que os vais a encontrar porque mientras dais jabón, sois extraordinarios, pero cuando dais un palo, sois hijos de la otra parte”, apostilló.

Roldán y Morán, compañeros

El periodista melillense aseguró que la emoción de ayer tenía un doble motivo, pues momentos después también se iba a descubrir una segunda placa, la de la calle dedicada a un compañero suyo, Ángel Morán, con el que trabajó, pero que “injustamente se fue pronto de nuestro lado”. Por último, agradeció “el detalle” que tuvieron con él la APM, la APDM y la Ciudad Autónoma.
La misma emoción sintieron las hermanas de Ángel Morán, tras descubrir la placa de la calle que lleva su nombre. Isabel y Julia dijeron de él que fue “el mejor hijo, padre y hermano mayor que se puede tener. Mi hermano fue la persona más honesta y honrada tanto en su vida personal como en la profesional. Pero sobre todo, en la personal, que es la que más nos ha unido a mi hermano”.
Ángel Morán tiene su propia calle en Melilla a propuesta de la Asociación de la Prensa de Melilla. Su presidente, Javier Calderón, fue el encargado de leer ante los medios de comunicación las declaraciones de la hija del periodista, Marta Morán, quien por motivos personales no pudo asistir al acto. “Es para mí sumamente difícil no poder asistir a este acto en un día como hoy, cosa que lamento desde lo más profundo de mi corazón. Si mi padre hubiera estado ahí, hubiera dicho que no era merecedor de tal reconocimiento, dado su carácter humilde y modesto. Pero yo pienso que sí lo merece por la entrega y el amor que tuvo a su profesión; por su gran carácter y el amor que tenía a esta ciudad se lo merece. Es un orgullo ser su hija, haber vivido y haber estado con él hasta el final porque no se ha ido. Está todos los días conmigo, en el recuerdo de todos y ahora en un cachito de la ciudad. Gracias a la APM por hacerlo posible”.
El presidente de la Ciudad compartió el mismo sentimiento que los allí presentes. “Estoy contentísimo de que Ángel tenga una calle en Melilla porque en un momento histórico como la Transición Democrática representó el mundo del periodismo”, destacó. Imbroda recordó una entrevista que Morán le hizo recordando precisamente esos momentos y nos emocionamos mucho. Era una bellísima persona y un gran melillense”.
Por último, Calderón se sumó al homenaje al periodista melillense que la entidad que preside propuso a la Ciudad Autónoma. “La Asociación de la Prensa de Melilla le debe mucho a Ángel Morán, pues hoy no sería lo que es. Los que le conocimos, podemos decir que aprendimos mucho de él como persona y como profesional”, concluyó.

Mingorance marcó la primera mitad del siglo XX

Los nietos de José Mingorance Alonso fueron los encargados de descubrir el monolito con el nombre de su abuelo en el vial que comunica el barrio de Huerta Salama con El Real. La Asociación de Estudios Melillenses (AEM) propuso a la Consejería de Cultura dar nombre a una calle al que fuera director del periódico Popular de Melilla, que fue el medio referente en la primera mital del siglo XX en la ciudad. Así lo reconoció el presidente Imbroda: “Su voz fue escuchada y muy importante en los primeros 40 años del siglo XX de Melilla. Es un homenaje justo y merecido que había que hacerlo ya y restituir un compromiso del pueblo de Melilla que le debía a un periodista insigne. Estoy muy orgulloso de tener a sus nietos aquí, que han venido expresamente para este acto”.
Isabel Cruz Mingorance manifestó su agradecimiento por el reconocimiento realizado a José Mingorance: “Estoy muy agradecida por el reconocimiento a la labor de mi abuelo que, junto con mi madre, nos estarán mirando desde el cielo y estarán contentos de vernos aquí hoy”.
Por su parte, el presidente de la AEM, Benito Gallardo, agradeció a la Ciudad Autónoma la aceptación de la propuesta que se hizo en su día desde la entidad.