El entrenador del Rusadir espera que el equipo muestre su verdadero nivel.
Rafa Torreblanca es un entrenador inconformista y sabedor de que su equipo puede dar mucho más de sí de lo que ha dado hasta la fecha. El míster estudiantil valoró para El Faro la primera vuelta del campeonato en la que el Rusadir se encuentra en puestos de descenso pero a tan solo tres puntos de la salvación. “Sinceramente, me esperaba mucho más del equipo. En parte es hasta lógico lo que nos ha pasado puesto que no es lo mismo trabajar durante dos o tres años con un bloque de jugadores que cogerlos, como ocurrió, apenas dos semanas antes del comienzo de la liga”, significó y añadió que: “El equipo tiene mucho más potencial que el mostrado hasta ahora y esperamos demostrarlo en la segunda vuelta”, aseguró el técnico melillense.
Al conjunto rojinegro le ha faltado regularidad, mejores arbitrajes y algo de suerte también. Rafa Torreblanca es consciente de ello por lo que significó que. “No hemos sido regulares y nos ha faltado encadenar dos o tres resultados buenos para que mis jugadores cogieran la confianza necesaria, porque, salvo los dos primeros clasificados Málaga y Almería B, el resto de equipos estamos muy igualados, y ganar tres partidos seguidos, te coloca en la zona media alta de la tabla”, reseñó Rafa; quien mostró su frustración por los malos arbitrajes recibidos. “Los arbitrajes están siendo muy crueles con nosotros. Parece increíble pero el primer penalti que nos han pitado a favor en lo que llevamos de temporada fue en la última jornada que disputamos en la visita al campo del Poli Ejido donde conseguimos empatar el partido. Eso sí, tuvimos que solicitar un árbitro neutral, corrijo: un árbitro no local, porque neutral deberían de ser todos. El club está haciendo un gran esfuerzo y, seguramente, el próximo desplazamiento a Jaén volvamos a solicitar otro árbitro no local, con lo que eso conlleva de gastos”, expresó el entrenador estudiantil.
Torreblanca tiene plena confianza en su plantel y asegura que el equipo está más formado con el paso del tiempo, hecho que deben aprovechar para terminar de remontar el vuelo en la segunda parte de la competición. Teniendo en cuenta, sobre todo, que la escuadra melillense disputará nueve encuentros en casa. Ocho como locales y uno como visitante ante el Gimnástico. “El equipo no estaba formado y hecho para competir. Ha costado unir el vestuario y ahora somos una auténtica piña. Tenemos muy buenos futbolistas y debemos aprovechar los partidos de casa para hacernos fuertes y cumplir el objetivo marcado porque ganar fuera de gana es mucho más complicado”, señaló y comentó que: “En la primera vuelta hemos tenido demasiados desplazamientos, algunos de ellos bastante duros y, ahora, en nuestro campo debemos imponer nuestra calidad y potencial para sumar de tres en tres porque, insisto, no somos inferiores a nadie”, aseveró.
El Rusadir es uno de los pocos equipos que no ha tenido descanso en este parón navideño como así manifestó su entrenador. “Hemos venido trabajando durante estos días todos los martes, miércoles y jueves. Al margen del aspecto físico, hemos trabajado tanto técnica como tácticamente y creo que eso lo vamos a notar de ahora en adelante”, concluyó el máximo responsable técnico estudiantil”.