El consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, es una de las nuevas incorporaciones al Gobierno local. Es la primera vez que ocupa un cargo político y llega al mismo con el convencimiento de trabajar por mejorar las condiciones que competen a su área. Es inspector jefe de la Policía Nacional y su nombramiento ha recibido el aplauso de los sindicatos de los distintos Cuerpos que están a cargo de su Consejería. González, en declaraciones a El Faro de Melilla, hizo un análisis de sus retos y objetivos dentro de esta nueva etapa como miembro del Ejecutivo de la Ciudad.
–Es una de las caras nuevas del Gobierno de la Ciudad y no es conocido en la política local. ¿Qué es lo que le ha motivado a ocupar su cargo como consejero de Seguridad Ciudadana?
–La motivación, más que profesional, personal. La verdad es que por tema profesional creía también que se podía parecer bastante. Soy de Melilla, he pasado un tiempo fuera, ahora mismo estoy aquí y la oportunidad de trabajar desde otro punto de vista y tener la oportunidad de gestionar más medios, gestionar la Policía Local, Bomberos… Era un reto profesional y personal. Pienso en un principio que esto va a ser un paréntesis, porque tengo 36 años y si Dios quiere me queda bastante trayectoria profesional. Personalmente creía que me podía aportar muchas cosas a la parte profesional. Como reto personal y profesional, eso es lo que me ha motivado.
–¿Cómo le fue comunicado el nombramiento?
–El presidente de la Ciudad me lo ofreció, me dio un tiempo oportuno para pensarlo y fueron varias las entrevistas que tuvimos.
–¿Qué sintió en el momento en el que juró el cargo?
–Orgullo y responsabilidad, porque durante varios días parecía que había trascendido un poco que podía ocupar el cargo que se me había ofrecido. Era bastante la gente que me había preguntado, sobre todo policías locales que me preguntaban si lo iba a aceptar. Durante esas horas percibí por los mismos miembros del Gobierno, por familiares y por mí que la gente parecía que lo había aceptado bastante bien y estaba contenta. Si había responsabilidad, ahora un poco más por cumplir, aparte de las expectativas del presidente, de la gente que sé que ha confiado en mí y tiene ganas e ilusión que de lo que se pueda mejorar, se mejore y no empeorar nada que también es importante.
–¿Qué cree que puede aportarle al Gobierno de la Ciudad?
–Aunque nunca he estado en política, estoy informado, leo la prensa y creo que la política a nivel local exigía caras nuevas, que algunos puestos se cubrieran por profesionales, que se llegara a esa renovación democrática que ahora tanto suena. En el sentido de que lleguen caras nuevas, ideas nuevas, personas que de alguna manera ocupen cargos que lleven por detrás una cierta trayectoria. Puedo aportar frescura, juventud, aunque haya compañeras más jóvenes. Políticamente, intentaré aprender rápido y ponerme al día. El recibimiento por parte de los compañeros ha sido muy bueno, porque muchos ni nos conocíamos personalmente.
–Tiene una dilatada carrera dentro del Cuerpo Nacional de Policía. ¿En qué medida su trayectoria profesional redundará en este nuevo cargo?
–Todo el mundo me advierte de que esto es un cargo político, aunque también no creo que haya que separar que el presidente, si ha pensado en mí para ocupar este cargo, sabe perfectamente que soy miembro de la escala ejecutiva y que soy policía nacional. Habrá que conjugar un poco las dos vertientes del cargo. Indudablemente tengo que hacerme a la idea de que soy político, pero para mí siempre seré policía y soy policía. Aportaré toda mi experiencia profesional. Creo que es ventajoso para la propia ciudad la buena relación que creo que personal y profesionalmente tengo con la Jefatura Superior de la Policía Nacional. Me han apoyado y sé que cuento con su ayuda. No tengo constancia de que las relaciones fueran malas, eran buenas, pero si cabe ahora estoy seguro de que van a ser mejores, tanto con la Policía Nacional como con la Guardia Civil.
–Los sindicatos creen que su nombramiento puede suponer un avance para Policía Local y confían en que hará una buena gestión. ¿Qué le gustaría transmitirles?
–Ya me he reunido con los sindicatos de Policía Local y de Bomberos. Me aportan esa confianza porque en los primeros contactos y lo que ellos me han transmitido, las peticiones las conozco y las veo normales. La gran parte de cosas que percibo son temas operativos y en un tanto por ciento importante, creo que son reivindicaciones normales que también se hacen en Policía Nacional y en la Guardia Civil. Por tanto, con ganas de trabajar, con ilusión y llegando a entendimiento creo que son cosas, la gran mayoría, fáciles de entender y fáciles de realizar. Son sindicatos pero son policías, saben que tengo ganas de trabajar, saben de mi responsabilidad y creo que las dos partes estamos ilusionadas. Tienen que entender que hay cosas que no van a depender de mí, no son sólo operativas, también hay temas económicos, de catalogación de puestos de trabajo… De alguna manera, siendo parte del Gobierno y teniendo claro la responsabilidad que tengo en ese sentido, les he trasmitido que yo me siento parte de ellos. Mi labor también va a ser defenderlos y luchar por lo que crea de justicia que ellos tienen que tener. Que lo pueda conseguir o no, pero voy a defender sus intereses y voy a luchar por conseguir lo que crea justo.
En un principio, las cosas que me han ido planteando son de justicia, lógicas y fácilmente conseguibles. De momento bien, por las dos partes. Estoy muy contento.
–¿Cuáles son las áreas que requieren de actuaciones más urgentes en el ámbito de su competencia?
–Hay cuatro problemas incluso un poco endémicos en Melilla, que son los menores, que lo conozco; el tema de la prostitución en ciertas zonas de El Real; las colas de la frontera por la OPE y otra fase de actuación que a lo mejor no es un problema para la ciudadanía, pero personalmente sí, es el tema del Rastro, la venta ambulante del pescado. Creo que se dispone de mucho personal operativo allí y el logro no es ninguno.
–De los cuatro problemas a los que se ha referido, hay dos de ellos que van ligados directamente a las reivindicaciones de los vecinos de El Real, que llevan años pidiendo soluciones. Ahora se ha reunido con ellos, ¿cuál es el resultado de ese encuentro?
–Me puse en contacto con ellos y quedamos en que lo mejor era que tuviéramos una charla tranquila. Vino además el vicepresidente primero, Manuel Quevedo. La verdad es que muy bien, ellos plantearon problemas como la frontera. Les expliqué la situación y les informé de la solución que proponíamos, la reestructuración del trafico. Vieron que habíamos trabajado y estaban esperanzados en que no se produjeran más esos atascos. Les pedí que entendieran que es inevitable, porque la calle está muy cerca de una zona fronteriza. Tráfico va a haber, pero no se puede colapsar como es cierto que se colapsó el viernes de la semana pasada. Estuvimos hablando también de los problemas que ellos iban planteando e intenté informarles de lo que yo ya sabía, como policía, por ejemplo en el tema de la prostitución. Conozco este tema y les planteé como objetivo próximo el poder desplazarlo de la calle. Además, de alguna manera más multidisciplinar con Bienestar Social, tratar la problemática de estas señoras y poder reducir el número de mujeres u ojalá eliminarlo.
También tratamos el tráfico de vehículos pesados, temas transversales con movilidad y creo que ellos, como han manifestado, se fueron contentos. Yo también, de conocerlos y ver sus problemas. Al final estamos para eso, para intentar reducir o minimizar al máximo los problemas que tenga la gente. Fue una reunión muy productiva. También me he reunido con el representante de la Asociación de Taxi, que me explicó la diferente problemática que tienen con el tema de los taxis piratas y les propuse posibles soluciones. Yo estoy intentando reunirme con todo el mundo que me busca o que me lo solicita. De momento, trabajando, con ideas.
–También ha hecho mención a los menores extranjeros no acompañados, otra cuestión que preocupa a gran parte de la ciudadanía melillense.
–Ya he tenido el primer contacto con Bienestar Social, conozco el tema porque he sido jefe del grupo de menores de la Policía Nacional durante tres años. Se va a hacer lo que se está haciendo. Y más, seguro que también. Nos vamos a sentar a ver si hay ideas que no se han sacado o por falta de motivación o falta de interés, que no creo, pero bueno, con el tiempo se quedan ahí. Los menas entran por la frontera, no es competencia de la Policía Local ni de la Ciudad y una vez que están en Melilla, creo que todos se trasladan al centro de estancia de estos chicos.
Una parte importante de ellos ya se sabe que no quieren estar en el centro y quieren estar lo mas próximos al puerto para entrar en los barcos, todo el mundo lo sabe. Por parte de Guardia Civil, Policía Local y Policía Nacional, me consta que se hacen más de 30 o 40 traslados en el fin de semana, 10 o 12 traslados diariamente y salen del centro. ¿Acabar con el problema de los menores? Sería que se nos diera una base legislativa en la que se pudieran devolver, porque entrar parece ser que van a seguir entrando y nosotros no podemos trasladarlos a la península. Si están en Melilla, están en Melilla. Quizás sería estudiar la manera de endurecer las medidas y tener la potestad para que un menor que no cumpliera con el horario de vuelta al centro, se le impidiera la salida durante una serie de días. No sé cómo está el tema legislativo, pero quizás podría ser un objetivo a luchar.
¿Cómo se le impide la salida? Tendría que formar parte de Fiscalía, pero si al menor que se le recoge siete veces en siete días de la semana, al octavo vuelve a salir, pues más que un tema policial es un tema de traslado. Se van al centro, han estado unos días en la calle intentando acceder al barco, no lo consiguen, vuelven, cenan, se duchan y vuelven a salir. El tema policial es complicado, yo lo único que pediría es que cuando los ciudadanos vean una situación así, de un menor en la calle en sitios insólitos durmiendo, que llame para que por parte de Policía Local, Nacional y Guardia Civil se acuda y se produzca el traslado. Pero si en el centro, que tendrá sus limitaciones legales, conforme llegan, al día siguiente vuelven a salir y no se les toma ninguna medida para cumplir esas normas de horarios, creo que se consigue poco y lo saben la mayoría de los ciudadanos. Por ahí va la idea, pero siempre con un respaldo legal.
–En las reuniones con los sindicatos de Policía Local habrá tenido la oportunidad de tratar sus reivindicaciones. Las demandas de los profesionales pasan por un aumento de plantilla, falta de chalecos y medios para desempeñar su trabajo de forma óptima. ¿Va a dar respuesta a sus peticiones?
–Son los temas que se me han trasmitido por parte de los sindicatos, pero lo que me alegra, me tranquiliza y me da la ilusión de que esos objetivos se van a conseguir es que por parte de la Jefatura se tiene conocimiento y se tienen esos mismos objetivos. Cuando se pregunta por qué no se ha dado respuesta a esto, te lo explican y parecen cuestiones que son lógicas.
En cuanto a la falta de personal y plantilla envejecida, desgraciadamente casi en todos los Cuerpos policiales pasa así. Ahora tenemos unas oposiciones que va a salir ya, ya se convocó, pero estaba en fase de formación del Tribunal. En breve queremos que empiecen las pruebas. Van a ser diez policías locales más. Como promocionaron oficiales a subinspectores, la escala de oficial también se ha quedado un poco descompensada y en cuanto entren los policías locales se van sacar también plazas de oficial. Como dijo el presidente en campaña, la idea del Gobierno es sacar un numero importante de plazas durante estos cuatro años. Sacar cien plazas no es que se vaya a incrementar la plantilla en ese número, porque siempre hay jubilaciones durante estos años. Pero sí va a ser un incremento importante.
Se está en previsión de ver los presupuestos y las indicaciones del Gobierno de la nación para poder convocar esas plazas, pero tengo la idea y así me lo ha trasmitido el presidente de que se quiere aumentar la plantilla de la Policía Local y de los Bomberos.
Con respecto a los chalecos, se me ha trasmitido que en esta legislatura tanto en la Guardia Civil, Policía Local, Nacional y autonómicas del territorio hubo un boom de solicitudes y la empresa con la que se contactó para que los suministrara sólo pudo dar 20. Estamos viendo cómo es la manera mas rápida de adquirirlos, pero mis indicaciones han sido que se adquieran 100 más. La parte operativa, la que está en la calle, tendría chalecos antes de que terminara el año. El año que viene se comprarían los restantes para que todos los funcionarios de toda la plantilla que tengan algún contacto al publico tenga su chaleco.
–¿Y en cuanto a la mejora de la flota de vehículos?
–Nada más entrar se quemó el motor de un coche por un cortocircuito. Ese mismo día ya llegaron los cinco coches que se presentaron, que ya están operativos. Según se me ha trasmitido desde Jefatura, esos vehículos son los que mas están en la calle y estarían mas o menos cubiertos. Lo que sí hace falta son ‘combis’, otro tipo de vehículos mas grandes. Hay otro vehículo que necesita cambiarse, que es para el grupo de desplazamiento de material. Hay presupuesto y creo que antes de que finalice el año, algo de flota se cambiará. También los Grupos de Respuesta me han dicho que las furgonetas necesitan, cuando podamos, un cambio.
–¿Será una realidad esta legislatura el proyecto de reforma de la Jefatura de Policía Local?
–Ese tema no me ha dado tiempo a afrontarlo. Sí he recibido información por parte del director general y del anterior consejero acerca de en qué situación se encuentra ese proyecto. Parece ser que está en Fomento, que está hecho y falta la última autorización e incluso la licitación por parte de la empresa. Según la información que tengo, confío en que sí y bastante antes de que termine la legislatura, por la información que tengo hasta ahora. El dinero, que puede ser lo más importante, está. Lo que falta es el proyecto de licitación, que pase la últimas revisiones, autorizaciones y que se empiece. Según me han dicho, lo veo factible, real y antes de que termine la legislatura.
–También ha mantenido reuniones con los miembros del Cuerpo de Bomberos. ¿Qué necesidades le han trasladado estos profesionales?
–Son las mismas reivindicaciones que el resto. Las que me han trasmitido son normales, por lo que también se va a llegar a buen puerto. La Jefatura de Bomberos sabe los problemas que existen. En una misma dirección se pueden conseguir. Algunos son más difíciles o más en tiempo, pero otros son más inmediatos y de fácil solución o ejecución. Me he reunido con la jefa de Bomberos, con todos los turnos, voy a tener la oportunidad de hablar con todo el Parque de Bomberos. He tenido ese primer contacto y he tenido un recibimiento muy bueno. Existen problemas, pero hay que trabajar, para eso hemos venido.
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