Al Sindicato Unificado de Policía (SUP) de Melilla no le ha gustado que el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, restara importancia al incidente que tuvo lugar el pasado lunes por la tarde en la frontera de Beni Enzar, donde medio centenar de personas arrojaron piedras y otros objetos contundentes a los agentes españoles que se encontraban de servicio en ese momento. Mientras que el sindicato calificó lo ocurrido de “apedreamiento”, el delegado del Gobierno afirmó que el suceso no había alcanzado tal magnitud, aunque admitió que se había arrojado algún objeto contra los policías.
El secretario general del SUP en la ciudad autónoma, Jesús Ruiz Barranco, señaló en la jornada de ayer a El Faro que “una sola pedrada ya es lo suficientemente grave como para provocar la reacción de la Delegación del Gobierno”. En este sentido, lamentó que El Barkani practique “la política del avestruz” y no se produjera una respuesta institucional inmediatamente después de lo ocurrido. “No es de recibo que el delegado valore que únicamente se lanzó una piedra o que no se produjeran heridos”, lamentó.
En cuanto a las diferencias entre la versión ofrecida por los sindicatos policiales y Delegación, sustentada en informes oficiales, Ruiz Barranco apuntó que la de El Barkani estaba “bastante maquillada”.
¿Prevaricación policial?
Hay que recordar que el incidente se inició cuando la Policía Nacional se negó a dejar pasar a Melilla a dos personas que acompañaban a un aduanero marroquí y que no tenían pasaporte. Cuando los tres rechazados se dirigían a ‘tierra de nadie’ comenzaron a criticar, a voz en grito, la actitud de los agentes españoles, lo que provocó que otros ‘sin papeles’ que había en la zona se uniera a la protesta y arrojan piedras y botellas contra la Policía.
Este punto del incidente ha sido confirmado tanto por los sindicatos como por el delegado del Gobierno. Este último reprochó la actitud del aduanero, la cual tildó de “intolerable” y afirmó que en algunos casos puntuales se ha dejado entrar en la ciudad autónoma a personas sin visado, insistiendo en que se trataba de situaciones excepcionales.
Esta afirmación no ha sentado demasiado bien en el SUP, cuyo secretario general señaló que cuando se dan casos de este tipo es por orden de los mandos. “Espero que El Barkani no esté insinuando que los agentes de la frontera dejan entrar en Melilla a personas sin documentación, porque sería prevaricación”, agregó.
Por otro lado, señaló que cuando el sindicato informa sobre incidentes como el del lunes “es con conocimiento de causa”. En este sentido, afirmó comprender que el delegado del Gobierno se apoye en informes oficiales, aunque advirtió de que en éstos “se pueden suavizar los hechos”.
Para finalizar, el sindicalista destacó que para que no se vuelvan a producir agresiones como la de esta semana es necesario que la ‘tierra de nadie’ se convierta en una auténtica zona de tránsito entre ambos países y que no esté como hasta ahora, llena de personas que, lejos de dirigirse a uno u otro país, se dedican al contrabando, a vender documentación para el visado o, sencillamente, a esperar una oportunidad para colarse a la carrera.
La gran duda de las formaciones sindicales de Policía Nacional, así como de la AUGC, es sí la mejora de Beni Enzar servirá para poner punto y final a sucesos como el del lunes. El secretario general del SUP, Jesús Ruiz Barranco, confía en que así sea, aunque advirtió de que la paciencia del sindicato tiene fecha de caducidad: Junio de 2014, cuando el proyecto esté acabado.
“Es una obra en la que van a invertir dos millones de euros”, recordó. “Esperemos que sirva para solucionar problemas. Si no es así, mejor que dediquen ese dinero al complemento salarial de los agentes por prestar servicio en la frontera”, apuntó el sindicalista.
La mejora estará lista para afrontar la OPE del próximo año, fecha del año en la que un mayor flujo de vehículos registra la frontera. “A partir de junio, con la obra ya acabada, cuestionaré todo lo que no funcione adecuadamente. Es mucho dinero el que se va a destinar a esta iniciativa y queremos que dé sus frutos”, concluyó el máximo dirigente del SUP.