Está “casi convencido” de que los asaltos de inmigrantes a la valla fronteriza cuentan con apoyo desde la ciudad autónoma. El delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, compartió ayer sus sospechas con los periodistas de los medios locales y de los nacionales llegados a Melilla atraídos por las avalanchas de subsaharianos de los últimos días. El máximo representante del Ejecutivo central en la ciudad reconoció que no dispone de datos firmes sobre los que sustentar sus suposiciones. El Barkani explicó que la falta de pruebas le impide acudir a la Fiscalía, pero sin duda no habrá dudado en transmitir a los responsables de la Guardia Civil y de la Policía Nacional la necesidad de ordenar una urgente investigación para descubrir a esos presuntos delincuentes.
Las palabras del delegado se producen un día después de calificar el último asalto como una “invasión en toda regla” y de denunciar la “actitud prepotente y agresiva” de los inmigrantes. Ayer alertó de que un millar de inmigrantes esperan al otro lado de la frontera una oportunidad para entrar en Melilla y se mostró seguro de que el vallado sufrirá nuevas avalanchas. Al mismo tiempo subrayó que el martes los subsaharianos llegaron provistos de piedras y palos en “una actitud agresiva”.
Si algún ciudadano buscaba en las palabras del delegado del Gobierno motivos para recuperar la calma, sin duda, se habrá sentido defraudado. Abdelmalik El Barkani describió ayer la situación sin tapujos, como la percibe en función de las informaciones que le llegan a su despacho. Y concluyó que el problema sobrepasa el ámbito de actuación de Melilla, de Marruecos e incluso de España. Argumentó que las soluciones deben llegar del conjunto de la Unión Europea, a donde también llegarán los informes de los acontecimientos que se están sucediendo en los últimos días. Sin duda, estos hechos generarán inquietud en los responsables europeos, aunque quizás no sea tan intensa como la preocupación con la que los melillenses están recibiendo la descripción de los hechos que realizan sus representantes políticos más cercanos.