Sindicatos y asociaciones de la Policía Nacional y la Guardia Civil: "La frontera está en pañales"

Sindicatos y asociaciones de la Policía Nacional y de la Guardia Civil se han unido en una plataforma para pedir una "frontera segura" a las autoridades ante la inminente reapertura de los pasos fronterizos de Melilla con Marruecos después de más de dos años cerrados.

En una rueda de prensa ofrecida a los medios de comunicación, han leído un manifiesto en el que han recordado los numerosos problemas que existían cuando los pasos estaban abiertos, como las avalanchas humanas o la descoordinación entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, y es por ello que reclaman un aumento de la plantilla, la especialización de los agentes en frontera, la remodelación de las infraestructuras para mejorar la seguridad, mejores medios tecnológicos y un protocolo claro Schengen, entre más aspectos.

Las integrantes son la AUGC, AEGC, ASESGC, los sindicatos de la Policía Local (SLPM), CCOO, el SUP, CEP y la UFP. Jesús Barranco, del SUP, ha explicado que no tienen ninguna información aún sobre la reapertura de la frontera, aunque sí ha dicho que los agentes destinados a la frontera han sido avisados que tienen que volver a su puesto el 1 de mayo. "Aunque eso no quiere decir que se vaya a reabrir en esa fecha", ha matizado.

Ha criticado que en estos dos años no se ha realizado un mantenimiento a fondo de los puestos fronterizos y que por ejemplo, el de Beni Enzar, que sí ha permanecido abierto, no está siendo limpiado desde hace meses. "La frontera está en pañales", ha afirmado.

Juan José Muñoz, delegado provincial de AEGC, ha apuntado que "lo más grave" es que Delegación del Gobierno se haya reunido con la Confederación de Empresarios (CEME) para hablar sobre la reapertura de la frontera y no lo haya hecho con sindicatos o asociaciones policiales. Si ha matizado que sí ha habido reuniones con los altos mandos, aunque cree que los componentes asociativos "tenemos que tener voz y voto", ha subrayado.

Por su lado Sergio Márquez, de AUGC, ha dicho que lleva denunciando estos dos años "esa dejadez", pues cree que se podrían haber implementado todas las mejoras prometidas mientras los pasos han estado cerrados y ha recordado que ha habido ocasiones en las que los agentes ha tenido que estar trabajando mientras se han realizado obras, con todas las incomodidades que eso conlleva.

Pedro M., secretario de riesgos para salud de AUGC, ha querido recalcar también que hay que tener en cuenta la salubridad de los puestos fronterizos pensando en los guardias civiles y policías que allí trabajan así como en las personas que cruzan, ya que existe una contaminación acústica y de humos que perjudican la salud de dichos colectivos. "No todo es  preparar la frontera inteligentemente, también hay que pensar en la en la salud de los funcionarios y las personas".

El manifiesto

PLATAFORMA POR UNA FRONTERA SEGURA PARA UNA MELILLA SEGURA

Ante la incierta situación que se presenta con la próxima apertura de las Fronteras terrestres, los sindicatos y asociaciones representativas de las fuerzas y cuerpos de seguridad, queremos manifestar lo siguiente:

Después de dos años con la fronteras con Marruecos cerradas y habiéndose producido, como únicas entradas a Territorio Nacional los saltos de migrantes con violencia y acometimiento a las fuerzas y cuerpos de seguridad que velan por la integridad territorial, queremos advertir a las autoridades competentes que las condiciones necesarias para acceder a Territorio Nacional tendrán que estar condicionadas por la nueva situación sanitaria generada por el covid19.

En estos pasos fronterizos se efectuaban un promedio de 30 mil tránsitos de personas y vehículos en base al tratado de buena vecindad del Reino de Marruecos, con un escaso control documental y sanitario, avalado por éste tratado de buena vecindad se producía un flujo constante y frecuente de mercancías sin ningún tipo de control hacia el país vecino.

Las autoridades locales y estatales han conocido durante muchos años de estos hechos e incluso lo han consentido y favorecido, priorizando el contrabando en detrimento de la normativa y seguridad en los puestos fronterizos. Los Policías y Guardia Civiles, que han prestado servicio en ellas, se han visto presionados por esta forma de trabajo poco reglada y arbitraria.

Estas situaciones han originado avalanchas multitudinarias que originaron la muerte de varias personas y siendo frecuentes las lesiones de diversa consideración entre los agentes de la fuerzas y cuerpos de seguridad encargado de la custodia y control fronterizos.

Los sindicatos y asociaciones firmantes, hemos denunciado reiteradamente en todos los ámbitos esta situación que se daba principalmente en los pasos fronterizos, llegando los vehículos dedicados al contrabando a colapsar y cerrar al tráfico alguna de las vía públicas de esta ciudad.

Hemos denunciado la falta de personal para poder hacer frente a un control efectivo y ágil de los miles de ciudadanos que honradamente quieran entrar a Melilla, si a ello unimos la falta de instrucciones claras, protocolos de actuación e instrucciones concretas sobre el modo de actuar, da origen a que podían originar que existiesen arbitrariedades para el acceso.

También hemos manifestado por activa y por pasiva que las instalaciones fronterizas no reúnen ni de lejos las condiciones idóneas para poder realizar el trabajo de los agentes.

La descoordinación entre los mandos de la Policía y de la Guardia Civil en los puestos fronterizos ha llevado a solapamientos en la realización de las funciones propias de cada cuerpo policial. Muchos son los responsables políticos y policiales que han llegado a esta ciudad, con poca o ninguna aportación de mejoras para las misma, han conocido in situ la situación fronteriza y todo ha seguido siendo un “Caos”

Desde marzo de 2020 en la que Marruecos cerró unilateralmente la frontera con Melilla, no se ha llevado a cabo por parte de los responsables político-policiales, ningún tipo de actuación tendente a mejorar ni las condiciones físicas de la propia frontera ni las de los propios funcionarios que prestan servicio en la misma estando en la actualidad sin ningún de mantenimiento por culpa del abandono.

Los puestos fronterizos terrestres de Melilla necesitan de una amplia y efectiva remodelación para poder prestar un servicio acorde a lo que demanda nuestra sociedad y nos tememos que se hará dichas actuaciones con la frontera abierta y los agentes fronterizos de servicio.

Criticamos que en estos dos últimos años no ha existido la necesaria fluidez de información entre la Delegación del Gobierno y los representantes sindicales que conforman esta plataforma y que somos una parte esencial en el control fronterizo

CONCLUSIONES:

• Aumento de plantilla exclusivo para los puestos fronterizos.

• Exigimos personal policial fronterizo catalogado y especializado

• Remodelación de las infraestructuras fronterizas, para evitar intrusiones violentas(kamikaces)

• Medios técnicos de detección de personal(Escaner móvil o escáner de camiones)

• Protocolo de actuación claro y acorde al tratado Schengen., para evitar inseguridad jurídica de los agentes.

• Adscripción de unidades especializadas de apoyo al control fronterizo, dígase, Guías Caninos, UIP y Policía Local.

• Exigencia de la aplicación rigurosa de la normativa de Prevención de Riesgos Laborales en los puestos fronterizos.

Los sindicatos y asociaciones que compone esta plataforma, estamos al servicio de la ciudadanía y vamos a estar vigilantes ante la nueva etapa que se avecina de apertura de fronteras y denunciaremos públicamente todas las anomalías que se cometan respecto de nuestra seguridad y condiciones laborales, así como las instrucciones que se den y afecten a nuestra integridad.

LA SEGURIDAD DE LA FRONTERA ES LA SEGURIDAD DE MELILLA