El Servicio Público de Empleo (SEPE) publicó ayer sorpresivamente los listados provisionales correspondientes a los planes de empleo. Sin ninguna comunicación previa, los melillenses conocieron la noticia casi de casualidad cuando en las redes sociales ciudadanos particulares informaron de que los listados se podían consultar en unos paneles colocados en los ventanales de la sede del organismo público.
Según confirmó la Delegación de Gobierno, las listas habían sido remitidas a última hora de la mañana a la Ciudad Autónoma, responsable de la gestión de estos planes. Sin embargo, desde el Ejecutivo se aseguraba que los funcionarios no habían recibido las listas al término de su jornada laboral.
Este dislate ha provocado que hasta el lunes, como pronto, la Ciudad no pueda subir a su web las listas completas y que la única opción para poder averiguar si se figura en los listados sea acercarse hasta la sede del SEPE y consultar los paneles. Un engorro que no parece propio de una sociedad del siglo XXI.
Sorprende que tratándose de un tema tan sensible como es el empleo, la Delegación de Gobierno no haya sido más cuidadosa a la hora informar a la ciudadanía. Hay cientos de personas en Melilla que dependen de uno de estos puestos de trabajo (ellos y sus familias) y no parece lo más razonable hacer públicas las listas el día antes de un puente y sin previo aviso, generando desconcierto y malestar.
En años anteriores, era el director de la Delegación Provincial de Empleo el encargado de anunciar con antelación la salida de los listados pero el retraso a la hora de nombrar a un responsable ha generado una situación exasperante y desconcertante en la que los principales perjudicados han sido los ciudadanos.