Tres meses y medio después de la reapertura de la frontera de Beni Enzar, el pasado día 17 de mayo, continúan las largas esperas, especialmente, en el caso de este domingo, en la entrada hacia Melilla.
Aunque apenas se veían coches ayer por la tarde, Mohamed ha dicho que había “muchísima cola para entrar y salir”, tanto andando como en vehículo. “Más o menos, lo mismo”, ha declarado a las puertas de la frontera. Él se fue a Beni Enzar el sábado, porque tiene una casa allí, y había venido a Melilla por la tarde junto con un amigo para tomar un refresco. Mohamed, quien vive en Almería, ha destacado que veía la frontera “más triste que nunca”, porque, mientras que antes se pasaba “rápido”, ahora hay que enseñar el pasaporte “cada dos por tres”. En su caso, cinco veces: dos en España y tres en Marruecos. Tras el refresco, vuelta a Beni Enzar ambos y, en unos días, a Mohamed le tocará regresar a Almería.
Abdelaziz había ido a Beni Enzar y a Nador, andando, y traía una bolsa con verduras y frutas. Como “en coche hay mucha cola”, el suyo lo había dejado en un garaje. Aun así, en su opinión, “se tarda mucho en entrar y salir”, hasta el punto de que “uno se arrepiente” y, “cuando entra en Marruecos, se pregunta para qué ha entrado”. “Es asqueroso”, ha añadido, antes de reconocer que a él también le habían pedido el pasaporte “cada dos por tres”.
Otro ciudadano, también llamado Mohamed, ha asegurado que había estado una hora y media en la cola a pie. Bastante enojado, se ha preguntado “qué dicen de fontera ágil”, porque de eso “no hay nada”, ya que habitualmente se están esperando “una o dos horas” que pueden llegar hasta cuatro o cinco, con los coches llegando hasta el muelle. “Esto es imposible; es un calvario todos los días”. En su caso, el motivo de la visita a Beni Enzaer era el ahorro, ya que, sólo en frutas y verduras, paga “cuatro o cinco euros menos que aquí, hasta un euro el kilo”. “Esto lo están matando, todo es caro y le echan la culpa al transporte”, ha aseverado, antes de mostrar su desacuerdo con que esa sea la verdadera razón del encarecimiento de los precios.
Wallid había salido el fin de semana para ver a su familia en Farhana, ya que él trabaja en la obra en Melilla. Él también cree que los fines de semana “hay mucha cola”, hasta el punto de tardar entre dos y tres horas yendo andando. “Es lo que hay; hay que pasarlo para ver a la familia”, apuntó.
En este punto, hubo una pareja, formada por Joaquina y Juan Antonio, que incluso lo pasó mal. Fueron el jueves a ver a su hijo en Alhucemas, ya que trabaja allí en el colegio español. La entrada a Marruecos sí fue rápida más o menos, pero a la vuelta, según ha dicho ella, “sólo hay un guardia y dos puertas, una con carritos para bultos más grandes y otra giratoria”, la han mareado de un lado a otro y con “una cola impresionante”. Con todo, peor lo ha pasado su marido, quien ha regresado de Marruecos con un cólico y estaba “malísimo, con lágrimas y todo”. Y, aunque le gente les dejaba pasar, la Policía no se lo permitía, según ha aclarado ella. “Hemos tenido que pasar en nuestro orden, así que, la verdad, para no repetir”, ha asegurado. “En vacaciones, que vaya él a Málaga y ya lo veremos allí”, ha añadido.
En cuanto a Saida, ella y su familia fueron a pasar el fin de semana en su casa de campo. Tres horas para entrar y el domingo “sólo una horita”, lo que, visto lo visto, “está muy bien”, ya que, aunque por la parte de fuera la frontera estaba “vacía”, dentro “hay mucha cola”, aseguró. De hecho, pese a que tienen una casa de campo donde pueden pasear y pasar el rato tranquilamente, van solamente un fin de semana de cada dos, debido a que, según Saida, “no se puede con esta frontera”. El verano lo pasó toda la familia junta en la casa de campo, pero ahora, una vez terminado, van allí de vez en cuando a relajarse con el “fresquito”, ha subrayado Saida.
Sin embargo, no todos estaban descontentos con las esperas. Por ejemplo, Ismael piensa que “más o menos va rápido y bien”. Eso sí, como piden mucho el pasaporte, lo mejor, aseguró, es llevarlo en la mano. Apenas un día en Marruecos para ver a su familia, pero, al menos, había merecido la pena, ya que todo fue “bien”, según ha destacado.
De parecida opinión era Foat, quien vive en Barcelona y llevaba nueve años sin entrar a Marruecos. Según él, la cola ha estado “bien”, puesto que no ha tenido que esperar demasiado, tan sólo unos 30 ó 40 minutos. Y, para la entrada en Marruecos, “directo”, ha asegurado, antes de apuntar que no se veía mucho tránsito, al menos no el que solía haber, y que ahora “está todo muy bien organizado”.
La Delegación del Gobierno ofreció datos actualizados del tránsito por la frontera desde el pasado día 16 de agosto a las 8:00 horas hasta el pasado viernes, día 30 de septiembre, a las 8:00 horas también. Según dicha información, de Marruecos a Melilla 90.882 personas cruzaron durante esta segunda mitad de verano, mientras que en el sentido contrario la cifra fue de 81.053 personas. Por lo que se refiere a los vehículos, 50.209 entraron a la ciudad autónoma durante este período de tempo, en tanto que 35.540 salieron desde Melilla a Marruecos. Se trata de unas cifras que confirman la sensación que uno tiene al acudir a la frontera y que ratifican los ciudadanos consultados por El Faro, en el sentido de que el tráfico hacia Marruecos suele ser, o eso parece, menor que el que hay de entrada en la ciudad autónoma. Por lo menos, se puede cruzar la frontera. Eso es lo que dijo un niño, quien estaba contento y nervioso al mismo tiempo de haber conseguido cruzar, junto a su familia, a la ciudad autónoma. Y ahora lo único que espera es “que no vuelvan a cerrar la frontera” para poder seguir cruzando al país vecino durante los fines de semana, aunque, en muchas ocasiones, el precio que haya que pagar sea el de pasar varias horas de espera, especialmente en la vuelta a Melilla. Para muchos, puede que todo ello merezca la pena. Para otros, no tanto, y se preguntan si merece la pena pasar tanto tiempo en la cola por, en ocasiones, unas pocas horas en Marruecos.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…