Nuevo curso, mismos problemas. Así podría resumirse la impresión de SATE- STEs del inicio de las clases. El miembro del sindicato, Higinio Rodríguez, lamentó ayer la falta de previsión por parte de la Dirección Provincial de Educación. Rodríguez criticó que José Manuel Calzado hable ahora de sentarse a buscar soluciones a unos problemas que, a juicio del sindicalista, ya deberían estar resueltos. Reconoció que las alternativas que hay para reducir provisionalmente la ratio en las aulas tienen que ser analizadas con detenimiento, pero consideró que es un trabajo que ya tendría que haberse hecho para no perjudicar a alumnos y profesores que arrancan el curso con los mismos inconvenientes con los que finalizó el pasado.
Rodríguez indicó que desde hace años alumnos y profesorado sufren unas ratios “insoportables, irracionales y en algunos casos incluso ilegales, con hasta 32 estudiantes por clase desde el primer día”. En este punto, criticó que este año se haya decidido abrir un aula menos de Infantil de 3 años porque hay menos alumnos que en ejercicios anteriores. “Había una oportunidad de reducir la ratio y se pierde”, lamentó. Insistió, además, en que por muchos inconvenientes que puedan tener las medidas de urgencia para reducir el número de alumnos por aula mientras se construyen los nuevos centros, éstas tenían que haber sido tomadas ya. “Ningún alivio aporta que ahora la administración se plantee estudiar medidas de urgencia. Esto tendría que haberse hecho antes”, concluyó.
Tampoco es viable a juicio de SATE la cifra de profesores que hay actualmente en nuestra ciudad. El sindicato considera que harían falta unos 165 docentes más en nuestra ciudad para igualar la ratio alumno-profesor a la media nacional. “No vamos a hablar ya de las autonomías que tienen mejores cifras, sino sólo de la media española”, apuntó Rodríguez. Apuntó que el hecho de que este año haya doce docentes más que el pasado curso en la ciudad es bueno pero insuficiente. Señaló que la plantilla sigue siendo inferior a antes del inicio de la crisis y los recortes en educación, mientras que la cifra de alumnos se ha incrementado en unos 2.000.”La ratio de alumnos por profesor en Melilla es un 12,7% mayor que en la media nacional y aumenta año a año”, insistió.
El sindicato recalcó que esto tiene consecuencias negativas tanto para los profesores como para los estudiantes. “Las carencias destacadas y la saturación extrema de las aulas tienen como consecuencia un notable empeoramiento de las condiciones de trabajo de los docentes”, indicó Rodríguez, que señaló que esto incide en la calidad de la enseñanza inevitablemente. Además, añadió que la Lomce ha hecho que los profesores tengan cada vez más tareas burocráticas que realizar, que se suman a la carga de trabajo docente.
Necesidades especiales
En cuanto a los alumnos con necesidades especiales, SATE apuntó que también existen carencias. Apuntó que la creación de dos aulas TEA (Trastorno del Espectro Autista)y su correspondiente dotación de especialistas aunque sea positiva no esconde que los docentes de estas especialidades son insuficientes, con dotaciones que en algunos casos están incluso por debajo de la exigencia legal. El sindicato consideró que la “desidia” mostrada por el ministerio desde hace años, unida a los recortes ha agravado la situación. “Tenemos la misma carencia de centros, las ratios siguen siendo insoportables y la dotación de profesorado continúa por debajo de las cifras alcanzadas antes de los recortes”, apostilló SATE.
El sindicato SATE-STEs criticó ayer que los alumnos de las aulas de la antigua Casa de la Juventud no vayan a disponer por el momento de un mobiliario adaptado a su edad ni de pizarra digital ni ordenador. Aseguró que la situación es la misma que la del año pasado y lamenta que no se hayan buscado soluciones a estas alturas. Asimismo, SATE indicó que a pesar de tener la preinstalación, las clases no disponen de aire acondicionado, algo que el sindicato considera muy necesario. El miembro de SATE, Higinio Rodríguez, dijo que es incomprensible que en un centro tan nuevo se produzcan estas carencias. Por otra parte, destacó que hay colegios en los que las obras del verano no se han terminado a tiempo, en los que no se ha hecho la correspondiente limpieza a fondo, o que no han sido correctamente dotados de ordenador y mobiliario. En concreto, se refirió al colegio León Solá en el que dijo que ha habido un problema con la empresa adjudicataria de limpieza. SATE indicó que estas dificulatades agravan aún más las ya duras condiciones en las que el colectivo docente desarrolla su labor.
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