El salto fue violento. Para adentrarse en Melilla hay que sobrepasar a los guardias civiles que hay protegiendo la valla y los migrantes que lograron pasar las alambradas lo saben, ya que en caso contrario, pueden ser devueltos a Marruecos. Se llevaron por delante a los agentes y también les lanzaron piedras. Algunas de ellas impactaron contra la luna de uno de los vehículos de la Benemérita y otro coche más sufrió daños. Así lo aseguran fuentes consultadas por El Faro relacionadas con la Guardia Civil.
Estas mismas fuentes comentaron que son siete y no tres los guardias civiles que sufrieron heridas al enfrentarse a los inmigrantes con la intención de pararles para evitar que se adentraran en la ciudad. No obstante, las heridas son leves.
En cuanto al migrante que falleció tras saltar la valla, estas fuentes explicaron que se trata de un joven subsahariano que salió a la carrera nada más pisar el suelo, pero se desplomó por el cauce de un arroyo que hay en la zona donde se produjo el salto. No saben muy bien si sufrió una especie de infarto o bien fue la caída lo que provocó su muerte.
En la plaza de toros, un espacio que se ha habilitado para la acogida de marroquíes atrapados en la ciudad, pero a donde están llegando los migrantes que no tienen sitio en el Centro de Estancia Temporal, había varios jóvenes atendidos por la Cruz Roja en la mañana de este jueves.
Les tomaban la temperatura y les curaban las heridas en una de las puertas de este recinto. Sentados en la acera dejaban que los voluntarios y trabajadores de Cruz Roja les tomaran la temperatura y les curaran las heridas de las manos. Con caras de agotamiento y casi sin fuerzas se podía ver el desgaste físico sufrido por el salto. Alguno aún mantenía en los zapatos los clavos que les había permitido subir el vallado. También los ganchos que usaron para trepar. Y aunque alguno de los jóvenes intentaba hacer un gesto de victoria a la cámara de Faro TV, lo cierto es que lo acompañaba con media sonrisa. No había gritos de 'bossa' ni esa alegría que en otras ocasiones se ha podido ver en los chicos que lograban llegar a la ciudad.
Durante toda la mañana y la tarde un grupo de unos diez migrantes que habían saltado la valla permanecieron en la acera, bajo un toldo, fuera de la plaza de toros ante la atenta mirada de la Policía. Les pusieron unas vallas alrededor.
Los vecinos de la zona se preguntaban si era normal esta situación y también denunciaron cuántas personas más va a acoger esta plaza de toros. Indicaron que allí están juntando marroquíes atrapados con jóvenes que acaban de cumplir 18 años.
La Asociación Marroquí de Derechos Humanos indicó en su cuenta de Facebook que había más de 100 inmigrantes detenidos por parte de las autoridades del país vecino tras el intento de salto ocurrido a las 6:30 horas en la valla con Melilla. Esta entidad también apuntó que muchos migrantes habían acudido al hospital para curar sus heridas, mientras que otros habrían optado por volver a los bosques para evitar ser detenidos por la policía marroquí.
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