-
La festividad del Aid El Fitr reunió entre 8.000 y 10.000 musulmanes en la explanada de la Legión
-
El acto contó con la captación de donativos para la ONG Muslim Relief
Como cada año, la festividad del Aid El Fitr o Pascua Chica pone punto y final al ayuno realizado por miles de musulmanes durante el mes sagrado del Ramadán. El tradicional rezo colectivo puso especial énfasis en la relación de los fieles con Dios, como es habitual, pero este año incluyó otras cuestiones de especial interés. El imán hizo mención al papel que ejercen las mujeres en la familia y la obligación de las personas de ayudar a los más necesitados, según comentó el presidente de la Comisión Islámica de Melilla (CIM), Dris Mohamed Amar, al acabar el rezo multitudinario.
El presidente de esta entidad señaló que el acto celebrado en la explanada de la Legión reunió entre 8.000 y 10.000 musulmanes, aunque no supo precisar cuántos. Por otro lado, también señaló que se había llevado a cabo una captación de fondos para donarlos a la ONG Muslim Relief. La cantidad recaudada, de momento desconocida, se destinará a ayudar en los proyectos de esta asociación dirigidos a atender a los más necesitados.
El discurso
Las consideraciones referentes a las mujeres versaron sobre la importancia que éstas tienen en el núcleo familiar para vertebrar las relaciones y estrechar los vínculos con primos, tíos y “toda la familia en general”, indicó Mohamed Amar.
Tampoco faltaron comentarios para los jóvenes, quienes reciben ropa nueva como recompensa por haber completado el mes de ayuno con los correspondientes rezos, las lecturas del Corán y la realización de buenas obras. Así, el día del Aid El Fitr es la jornada escogida para mostrar las nuevas galas.
Sin embargo, el núcleo del rezo giró en torno a la bendición que supone la celebración del fin del Ramadán, ya que, según el presidente del CIM, es una jornada en la que se apela al temor de Dios. “El temor de Dios y la conciencia de ello es la base de todo comportamiento posterior del ser humano”, señaló Mohamed Amar. Según este musulmán, “gracias al temor de Dios y la toma de conciencia, se produce un acercamiento a Dios que produce misericordia”.
De acuerdo al presidente de la Comisión Islámica, los miles de personas que se concentraron en la explanada lo hicieron por la fe hacia el Todopoderoso y para celebrar su recompensa tras este mes de ayuno.