Reparto de puntos en un enfrentamiento de altura

La UD Melilla sigue encaramada una semana más en lo más alto de la clasificación tras conseguir un valioso empate ante el mejor equipo que ha pasado hasta el momento por el Álvarez Claro, en un partido que tuvo dos partes bien diferenciadas. En la primera el conjunto católico fue muy superior al equipo anfitrión y pudo dejar sentenciado el encuentro, pero tras el paso por los vestuarios el equipo unionista mejoró y pasó de dominado a dominador para rescatar un punto que le vale para mantener su imbatibilidad en casa.

De este modo, la Unión Deportiva cierra de manera exitosa una semana intensa en la que afrontaba tres partidos de alto nivel, dos de Liga y uno de Copa. La única nota negativa de este periodo la supone la lesión de Menudo, que tuvo que abandonar el terreno de juego al cuarto de hora de iniciarse el partido ante la escuadra católica con molestias en el abductor. El técnico local Luis Carrión vio el encuentro desde un palco de tribuna al tener que cumplir un partido de sanción tras la expulsión que sufrió en Cartagena.

Se respiraba un ambiente festivo tras el pase a dieciseisavos de final de la Copa del Rey en la que el sorteo emparejaba al equipo melillense con el Real Madrid, pero pronto quedó en anécdota cuando a poco de comenzar el encuentro Cristhian Britos lanzaba a la cruceta derecha de la portería de Dani Barrio un libre directo desde la corona del área, la jugaba continuaba con un centro al segundo palo donde Isi Ros se hacía con la pelota y dibujaba un pase de la muerte que Amaya aprovechaba para enviar a la red y adelantar a su equipo en el electrónico.

El tanto descolocaba al cuadro local y daba alas al visitante, que pudo ampliar diferencias en tres acciones consecutivas que no fructificaron por la falta de acierto en la definición. La primera en una acción del lateral Migue García, que tras subir la banda izquierda enviaba un centro raso que se paseaba por delante de la portería sin encontrar rematador y se perdía junto al palo izquierdo del portal azulino. La segunda en una acción dentro del área de Isi Ros en la que se plantaba delante de Barrio, pero su disparo forzado lo despejaba en última instancia la zaga local; y la tercera en un roba de balón de Julen Colinas, quien solo ante Dani Barrio cruzaba en exceso la pelota.

El juego transcurría en la parcela ancha donde el UCAM superaba en todas las facetas al equipo norteafricano, y por si fuera poco la Unión Deportiva sufría el contratiempo de la lesión de Menudo. El centrocampista sevillano abandonaba el terreno de juego quejándose de unas molestias en el abductor de su pierna derecha, por lo que habrá que estar atentos a ver cómo evoluciona el '10' azulino.

El Melilla, que no estaba pasando por un buen momento, conseguía igualar el marcador en una acción aislada en la que Ruano centraba al área, el central Javi Fernández se resbalaba y Yacine, en inmejorable posición, conectaba un perfecto testarazo ante el que nada pudo hacer Germán.

Pero la alegría no duraba mucho, puesto que apenas cinco minutos más tarde otra internada de Migue García por la banda izquierda acababa con un pase a Manu Onwu, que tras recibir de espaldas a la portería se zafaba de su marcador para girarse y conectar un disparo raso y cruzado que se alojaba de manera irremediable en la portería melillense para establecer el 1-2 en el luminoso.

A poco del descanso Ruano lo intentó con un disparo desviado, que tuvo su replica en un centro desde el flanco derecho que Collantes remató en primera instancia y el rechace lo recogía Migue García que enganchaba un potente zurdazo al que Dani Barrio respondía junto al primer palo para evitar el gol y enviar el cuero a córner. El lanzamiento desde el banderín de esquina lo remataba totalmente solo en el segundo palo Javi Fernández, pero el cabezazo del central católico se marchó fuera por poco. El primer tiempo finalizaba con una falta botada por Ruano que Yacine remataba de manera defectuosa. De este modo se llegaba al intermedio de un partido en lo que lo mejor para los de casa era el 1-2 que reflejaba el electrónico.

Tras el paso por los vestuarios el guión varió. La UD Melilla mejoró en casi todos los aspectos y fue un equipo más reconocible en relación al de las últimas citas. A poco de la reanudación Yacine dibujaba un centro desde la izquierda al que llegaba Otegui para disparar, pero el meta visitante Germán rechazaba el disparo. El crono avanzaba y el Melilla seguí llevando la iniciativa en el juego en busca de una recompensa que llegaba al filo de la hora de juego en una acción ofensiva en la que Ruano, ayer muy activo, habilitaba con un centro medido a Óscar García, que controlaba y conectaba un disparo cruzado ante el que nada pudo hacer Germán. De nuevo los anfitriones neutralizaban la ventaja visitante y en la grada nadie descartaba la remontada visto el momento que atraviesa el equipo que dirige Luis Carrión.

Ruano y Otegui lo intentaron con disparos lejanos que no encontraron su objetivo y a poco del final el trencilla sevillano Orellana Cid anulaba un gol al recién incorporado Titi a instancias de su asistente por fuera de juego.

La última ocasión del partido llegaba en a dos minutos de los 90 reglamentarios en un contraataque visitante que acabó con la pelota en los pies de Isi Ros, quien con todo a su favor disparó centrado a las manos de Dani Barrio, por lo que al final el reparto de puntos contentó a ambos equipos.