Medio Ambiente destinará casi un millón de euros para los servicios de playa

La Consejería de Medio Ambiente va a invertir cerca de un millón de euros en los servicios que se van a prestar en la temporada de playa que, según el titular Manuel Ángel Quevedo, será una “gran campaña”. Destacó que en equipamiento nuevo se destinarán 110.000 euros y el coste de los servicios fijos que se ofrece es de unos 860.000 euros.

En relación al presupuesto para nuevas adquisiciones, Quevedo destacó que serán 150 metros más de pasarelas de hormigón, habrá más duchas y baños en Galápagos, una nueva silla para discapacitados, un nuevo módulo de aseos para la playa de San Lorenzo, seis baños individuales para la Alcazaba y Horcas Coloradas, un mástil, 50 nuevos carteles, 200 nuevas sombrillas, una ducha adaptada en Galápagos, así como un lavapiés nuevo y que también habrá otros dos para Los Cárabos y todo el equipamiento para la playa para perros.

En cuanto a los servicios fijos con los que se cuentan cada año, están el de recogida de basura en la orilla y para ello hay diez personas que están cada día paseando por las playas; así como el de instalación de mobiliario que tiene un coste de 131.000 euros. En cuanto a los servicios de instalación de las redes y boyas de señalización también hay un barco que quita residuos y cuesta 50.000 euros. También se tiene un servicio de limpieza de arena y el de recogida de basura de los cubos que va al contrato general de recogida de basura y cuesta 260.000 euros.

Los servicios de consejería y de limpieza de baños cuesta 94.000 euros y el de salvamento, que depende de Seguridad Ciudadana, es de 284.000 euros.

También se cuenta con un servicio de playa inclusiva y tiene un coste de 94.500 euros.

Además, hay un servicio de vigilancia de 15.000 euros para la playa de Galápagos.

Para Quevedo todo esto es un coste “asumible” porque se trata de dar los mejores servicios para algo que usa todo el mundo por igual y que es gratis, como la playa. Remarcó que ahí no hay diferencias y que lo único que hay que hacer para coger un sitio mejor es madrugar algo más que otros.

Lo que habrá en las playas

Pero, ¿qué podrán encontrar los melillenses en las playas? El consejero de Medio Ambiente comentó que se contará con dos banderas azules más. Una será para San Lorenzo y otra para Galápagos, en esta última se instalará el servicio de enfermería en el barrio del Mantelete al no haber espacio suficiente dentro de la playa. Además, habrá 1.432 metros de pasarelas de hormigón; 1.000 sombrillas y otras 50 más reservadas para personas con movilidad reducida; ocho torretas con rampa; nueve sillas anfibias, ocho andadores y 16 muletas; seis almacenes; y 272 contenedores, entre los que habrá para basura orgánica, plástico, papel y vidrio para que los melillenses puedan reciclar.

Por último, el consejero de Medio Ambiente destacó que se cuenta con un proyecto de unos 300.000 euros para hacer que la playa de Aguadú sea más accesible para todos y que no solo los más valientes o jóvenes puedan disfrutar de esta zona abierta al mar.

El objetivo del Gobierno local, según indicó Quevedo, es que la temporada de playa se alargue hasta el 15 de octubre, porque en esas fechas sigue haciendo buen tiempo en nuestra ciudad.

La zona centro de segunda planta, en obras en dos semanas

La obra realizada en la zona sur de la segunda planta del Palacio de la Asamblea está casi terminada. Así lo destacó el consejero de Medio Ambiente que apuntó que en un par de semanas los funcionarios podrán volver a esta zona. De esta forma, se aprovechará también ese momento para arreglar lo que queda del Palacio de la Asamblea, que es la zona centro norte de la segunda planta, donde los partidos políticos tienen sus despachos, como es el caso de Coalición por Melilla (CpM), el PSOE y el Grupo Mixto. Quevedo aseveró que no se quiso hacer antes de las elecciones. Por lo tanto, se reubicarán los partidos políticos de forma provisional en la Asamblea mientras que hace la obra, que se terminará en dos o tres meses. Añadió que se ha conseguido hacer virtud de una necesidad, puesto que toda la climatización y los aires acondicionados, así como las luces, serán más eficientes y se ha podido reforzar también la estructura tras ese suceso de hace tres años, como fue el terremoto del 26 de enero.