El sindicato no confía en que la empresa pague a los casi 30 trabajadores que han ido a la calle
El Ministerio de Defensa ha rescindido el contrato que tenía con Proman para que hubiera ‘conserjes’ en la entrada de instalaciones militares. Por ello, esta empresa hizo firmar el finiquito a los casi 30 trabajadores que tenía en Melilla bajo la promesa de que cobrarán este dinero en 34 días. La fecha de la rúbrica fue el 31 de agosto y los empleados aún no han visto los cuatro meses que les deben de nóminas atrasadas.
El sindicato cree que estos despidos han sido improcedentes. Afirma a El Faro que no ha habido una finalización de obras y servicios, sino que realmente se ha producido esta ruptura del contrato porque Proman no tenía como pagar a los empleados.
UGT no confía en que esta empresa pague los meses que debe a los trabajadores ni que en unas semanas vean el dinero del finiquito.
Además, el sindicato señala que desde la sede de Madrid les han informado de que el banco de Estados Unidos que iba a facilitarle a Proman el préstamo para abonar los sueldos ha entrado en concurso de acreedores y por lo tanto, no contará con esta ayuda financiera.
La solución de Defensa es que por las noches haya militares vigilando las instalaciones mientras los 29 trabajadores de esta empresa se han ido a la calle porque ninguna otra quiere coger este contrato. La respuesta al Ministerio de otros centros de servicios es que el presupuesto era muy inferior al que se necesitaba para pagar a los empleados.
Pero lo más surrealista, según UGT, es que hay trabajadores de Proman que no se han podido inscribirse en el Servicio Público de Empleo porque la empresa les mantiene de alta como si estuvieran de vacaciones. Por lo tanto, tampoco pueden cobrar ahora la ayuda de desempleo y tendrán que esperar un mes más para contar con algún tipo de ingreso en sus hogares.