La ONG asegura que hay un margen de error de dos años por encima o por debajo de la edad real porque se usan medidas base de niños europeos.
La ONG melillense Pro Derechos de la Infancia (Prodein) afirma que las pruebas médicas realizadas esta semana para determinar la edad de los jóvenes inmigrantes que es esconden en las escolleras son “poco precisas y nada fiables”. El máximo dirigente de esta asociación humanitaria, José Palazón, señaló a El Faro en la jornada de ayer que este tipo de exámenes médicos tienen un margen de error bastante amplio, en concreto de dos años por encima o por debajo de la edad real.
La Policía Nacional y la Local han intervenido a lo largo de toda la semana en los alrededores del puerto comercial y la zona centro de Melilla para interceptar a los inmigrantes que intentan colarse en los barcos que zarpan rumbo a la península. En los últimos días se localizó a un total de 63 jóvenes, en su mayor parte acogidos en los centros para menores extranjeros no acompañados (menas) de la Ciudad Autónoma. Sin embargo, cuando se llevaron a cabo las pruebas de edad sobre 59 de ellos, se determinó que 41 superaban los 18 años, por lo que se les ha abierto un expediente de expulsión.
No obstante, la ONG no está nada conforme con el resultado de los exámenes médicos, que fueron realizados en una sola mañana en el Hospital Comarcal, según informó el viernes la consejera de Bienestar Social, María Antonia Garbín. La prueba consiste en realizar una placa isométrica sobre la muñeca de los jóvenes para determinar su tamaño. Unas vez comprobadas, se contrastan con un cuadro de medidas básicas que cataloga por intervalos de centímetros de la muñeca la edad del inmigrante.
Palazón destacó que para confeccionar dicho cuadro base se utilizan mediciones de jóvenes europeos, por lo que la prueba queda desvirtuada, a juicio del máximo dirigente de Prodein. “La estructura ósea de un niño magrebí no es igual a la de un noruego”, explicó. “Se trata de una prueba médica inválida. Más claro, agua”, apuntilló.
En la misma línea, insistió en que el margen de error aplicando dicha tabla a niños de Marruecos o Argelia es dos años por encima o por debajo de la edad real. “En este caso, una simple radiografía no basta para decidir quién se queda en España y quién no”, abundó Palazón. “Se trata de una prueba muy cuestionable. Apoyarse en ella sin tener más información es una locura”.
Además, criticó el hecho de que la Consejería no hubiera tenido tiempo hasta la fecha de trasladar a estos jóvenes al Hospital Comarcal para que les realizaran estos exámenes. “¿Cómo es posible que se hicieran 59 radiografías en una sola mañana?”, censuró.
Ocultos en las escolleras
Por otro lado, el máximo responsable de esta ONG melillense aseguró que la mayor parte de los inmigrantes que están las escolleras del puerto a la espera de poder subir a los barcos como polizones son menores de edad. “Hay incluso chavales que no llegan a los 10 años”, resaltó. Además, apuntó que la expulsión de los que han sido designados como mayores de 18 “no servirá para desahogar las instalaciones de La Purísima, porque éstas ya se encuentran vacías”.
Hay que recordar que Garbín manifestó el viernes que el principal problema del centro eran las continuas entradas y salidas de un grupo de jóvenes que se daban de alta para marcharse a las pocas horas en dirección al puerto comercial. Asimismo, la consejera defendió que hay “un número estable” de niños tutelados por la Ciudad Autónoma “que no da problemas de ningún tipo”.
Un centro sin niños
Sin embargo, en la jornada de ayer Palazón aseguró que La Purísima está “prácticamente desierta” porque la mayor parte de los menas se dedica a deambular por las calles de la ciudad en busca de una oportunidad para poder colarse en los barcos. “Bienestar Social ha recibido más de un tirón de orejas por permitir que estos jóvenes estén dando vueltas sin que nadie se ocupe de ellos”, apuntilló en alusión a las declaraciones realizadas por el el Defensor del Menor de Andalucía a El Faro. Dicha institución señaló que la Ciudad no puede dar de baja la tutela de los menas 24 horas después de que estos abandonen los centros, como se venía haciendo hasta ahora .
Por último, aseguró que la decisión de abrir un expediente de expulsión a los mayores de 18 años “les condenará a estar años vagando por Marruecos”, habida cuenta de que no podrán volver a entrar a España hasta dentro de un tiempo.
No obstante, hay que recordar que fuentes policiales señalaron el viernes a El Faro que los devueltos al país vecino tienen bastante probabilidades de volver a entrar en Melilla, pues para comprobar si pueden acceder o no, la Policía Nacional debe comprobar su filiación en las terminales informáticas que hay en cada puesto fronterizo, algo que no siempre se hace a causa del elevado tránsito de personas que se registra a diario.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…