F.M.R., el conductor detenido tras el atropello mortal a un ciclista el pasado domingo en Cabrerizas entró ayer escoltado por la Policía Local a los juzgados de Melilla. Tras prestar declaración el juez lo envió a prisión sin fianza.
Ya está en la cárcel. Un juez de Melilla decretó ayer el ingreso en prisión sin fianza para F.M.R., el conductor de un todoterreno que el pasado domingo atropelló y mató a un ciclista en la calle México de Cabrerizas.
El joven de 26 años, que dio una tasa de alcohol escandalosa, llegó ayer derrumbado a las dependencias judiciales a las 11:05 horas.
Fuera de los juzgados le esperaban tres amigos y familiares que le vieron entrar llorando a declarar ante el juez.
Al ver las cámaras de FaroTV, uno de ellos se acercó y aseguró que su familia está destrozada y que quiere pedir perdón por la tragedia ocurrida el domingo.
No es para menos. F.M.R. triplicaba la tasa de alcohol en sangre considerada delito (0,60). A las 9:15 horas supuestamente atropelló a Carlos Huelin, un joven deportista melillense, vinculado al mundo del triatlón, que trabajaba en una entidad bancaria del centro la ciudad.
“Le dio por detrás al ciclista y lo desplazó varios metros”, aseguraron a El Faro fuentes vinculadas a la investigación.
El impacto fue brutal. Carlos murió en el acto “porque la ambulancia llegó enseguida y no pudo hacer nada por salvarle la vida. “Ya estaba muerto”, apuntan las mismas fuentes.
Un test sobre las 10:30 horas
A las 9:20 minutos F.M.R. fue detenido en la Vía Láctea. Tras atropellar al ciclista se dio a la fuga, pero le reventó una de las ruedas del coche y no tuvo más remedio que parar.
Al bajarse del vehículo, según fuentes policiales, se cayó debido al estado en el que se encontraba. Por eso fue trasladado al Hospital Comarcal, donde le curaron las heridas y le hicieron un análisis que detectó 2 gramos de alcohol por litro de sangre. “Con menos hay personas que entran en coma etílico”, comentan fuentes cercanas a la investigación a El Faro.
Sin embargo, este primer control en sangre no tiene validez ante un tribunal, según explican, porque aún no se le habían leído sus derechos.
El control de alcoholemia que dio 1,8 gramos de alcohol en sangre (el triple del mínimo considerado como delito, que es 0,60) se le practicó a F.M.R. una hora y pico después de ocurrido el fatídico accidente, que acabó con la vida con un ciclista de esta ciudad. Eso fue pasadas las 10:30 horas, según las mismas fuentes.
Hay una marcha el sábado
La noticia de la muerte del ciclista de 38 años, que deja viuda y dos niños pequeños huérfanos, ha conmocionado a la ciudad.
Ayer mismo se decidía suspender el duatlón convocado para este sábado. En su lugar se hará una marcha a las 12:00 horas desde Suboficiales hasta la puerta de la Asamblea, donde se leerá un manifiesto para rendir tributo a Carlos Huelin.
Desde Policía Local recalcaron ayer que a partir de ahora se incrementará el número de tests de alcoholemia que se realicen en las zonas de ocio de Melilla. “Se hacen siempre. No nos quedamos fijos en un solo sitio porque la gente se avisa por el WhatsApp”.
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