Casarse es uno de los pasos más importantes en la vida de una pareja. Aunque sigue siendo una opción y el número de parejas que decide casarse disminuye cada año, las bodas cada vez son más espectaculares y se organizan con más tiempo.
Aunque hay 365, a veces 366, días posibles para casarse a lo largo de todo el año, los datos demuestran que sigue habiendo fechas favoritas para celebrar las bodas. ¿Cuáles son las más demandadas este 2024? Según el 'Libro imprescindible de las bodas' realizado por la web Bodas.net, el día más solicitado de este año es el 7 de septiembre. En Melilla, según han destacado a El Faro varios empresarios dedicados al sector nupcial, la primavera y los últimos meses del año son las épocas en las que se celebran más compromisos.
"En primavera y en verano es cuando se hacen más bodas", resaltó Encarni Jiménez. Ella es la propietaria de una floristería que lleva su mismo nombre y lleva muchos años dedicándose a la preparación de arreglos florales para bodas y todo tipo de eventos. Según destacó, lo que más piden las novias en Melilla para el día del enlace son flores en tonos blancos y pasteles. En su mayoría rosas o lilas aunque depende del gusto de cada pareja.
Una de las flores que más solicitan a Jiménez para el gran día son las hortensias, pero hay clientas con todo tipo de gustos. Hay quien prefiere decantarse por plantas en lugar de flores para adornar las mesas o el lugar de la ceremonia, ya que estas tienen una mayor durabilidad y son mucho menos delicadas.
En cuanto al precio, la florista destaca que aunque es una variable que depende del bolsillo de cada pareja, el coste mínimo de los arreglos florales es de unos mil euros.
Por su parte, la empresaria de moda nupcial Farah Ahmed señala que la primavera y los últimos meses del año son los favoritos de los melillenses para casarse. Siendo mayo, junio, septiembre, octubre y noviembre los más demandados.
Si profundizamos en las últimas tendencias de novias, la propietaria de la tienda 'Novias Farah' explica que los vestidos que más se están llevando son los de escote palabra de honor o los que tienen faldas con mucho volumen.
"Una cosa es lo que se lleva y otra cosa es la realidad", puntualizó Ahmed. Y es que casi ninguna novia acaba llevándose lo que venía buscando. La razón principal, según aclaró, es que los vestidos de novia tienen unos acabados óptimos y están muy bien formados para adaptarse al cuerpo. "Hasta que no te lo pruebas, no sabes lo que realmente te va a sentar bien", comentó, para añadir que "las que vienen buscando un escote en pico, se llevan un escote redondo y las que vienen buscando un vestido liso, se lleva uno de encaje".
En lo que sí coincide la mayoría es en el color. Y es que el blanco total se ha convertido en el color de referencia. Aunque hace unos años se puso muy de moda incluir detalles en tonos rosas o azules en el velo o en otros acabados, esto ha desaparecido completamente. En lo que sí se suele incluir algo de color es en los zapatos. Las novias normalmente prefieren ponerse un zapato en tonos metalizados o de algún color para poder así usarlo más veces.
Una opinión diferente es la que tiene Mohamed Oussidi, encargado de la tienda de moda de caballero 'Donovan Miller' en la que están especializados en vestir novios. Para él no existe una fecha favorita por las parejas en nuestra ciudad para casarse sino que hay bodas durante todo el año. Al menos es lo que nota en cuanto a ventas de trajes de novio se refiere.
En este sentido, Oussidi adelanta a El Faro que lo que más se lleva en moda nupcial para hombres son los colores atrevidos. Los novios han dejado atrás los típicos azul marino o negro para decantarse por rosas, celestes, burdeos y hasta blancos. Los chaqués además han pasado a la historia. Ahora los melillenses prefieren comprarse un buen traje para así poder usarlo en más ocasiones e ir cómodo todo el día.
Al hilo de esta cuestión, el protocolo se deja un poco de lado y el traje se convierte en la prenda más usada. Misma situación que ocurre con los accesorios. Las corbatas, sobre todo las más anchas, y a juego con los gemelos se venden por encima de las pajaritas. Los chalecos estampados y llamativos también están a la orden del día.
Hay parejas de todos los gustos. Los que sueñan con casarse en primavera o verano cuando suele hacer mejor tiempo y hay pocas posibilidades de que la lluvia estropee su gran día o los que huyen de cualquier posibilidad de que haga bueno y desean un frío día de invierno para contraer matrimonio. Aún así, el informe de la web del sector nupcial refleja que la mayoría de contrayentes son más de meses cálidos. Septiembre y junio son los más demandados hasta el momento.
En concreto, el mes de septiembre se encuentra a la cabeza con un 18% de solicitudes, seguido de junio y julio, con un 13%, y de octubre. Por el contrario, enero, febrero y diciembre, con un 1%, 2% y 3% respectivamente, son los periodos menos demandados.
Parece ser que las parejas se decantan más este año por fechas veraniegas. En cuanto a días concretos, el 7 de septiembre se corona como el más buscado. Tanto que durante este día se celebrarán más bodas que en todo enero y febrero juntos. También se resaltan en este informe el 14 de septiembre, el 21 de septiembre, el 22 de junio y el 15 de junio.
Otro de los datos que también ha analizado el 'Libro imprescindible de las bodas' es la edad media de los contrayentes, que se sitúa en los 34 años con 3,5 bodas por cada 1.000 habitantes. La edad más repetida está en los 32 años para las novias y 33 para los novios.
El informe de Bodas.net señala que la típica boda española tiene unos 130 invitados de media. Una cifra que se ha reducido bastante en los últimos años y que no depende del nivel de renta de los novios. Aunque pueda sorprender, las "bodas de alto copete" tienen una media de 109 invitados. De ellos, el 15% suele rechazar la invitación.
Las mayoría de ceremonias son además civiles. Un 56% lo son frente a un 44% que contraen matrimonio de forma religiosa.
El lugar favorito para celebrar el banquete son los sitios especializados en bodas con cocina o catering propio (59%), seguido de los restaurantes (26%). Una predilección que aumenta a medida que sube la renta de los novios en detrimento del restaurante. En esta línea, en 1 de cada 3 bodas eligen sitios que les ofrecen realizar el banquete y la ceremonia en un mismo lugar (36,3%).
En lo relativo a las invitaciones, el 84,1% de los novios elige una invitación impresa aunque las digitales crecen año tras año.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…