La carga laboral de los agentes se duplicará a causa de que muchos efectivos se van de vacaciones.
Algunos agentes de Policía Nacional y Guardia Civil ya miran con preocupación la llegada de las fiestas navideñas.
Durante estas fiestas, ambos Cuerpos de Seguridad perderán un tercio de sus efectivos cada uno, a causa de que es una época en la que muchos de sus integrantes aprovechan para tomarse unos días de vacaciones. Lo que para algunos suponen unas semanas de descanso y en compañía de la familia, para otros se traduce en una mayor carga laboral.
Así lo afirmaron en la jornada de ayer el Sindicato Unificado de Policía y la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) a El Faro. Ambas organizaciones subrayaron que durante las navidades hay agentes que ven duplicadas sus horas de trabajo a causa de la falta de efectivos.
“En la frontera será un no parar”, aseguró el secretario general del SUP, Jesús Ruiz Barranco. “Hay más trabajo y se nota muchísimo”, abundó. Asimismo, remarcó que en algunas zonas, como en la frontera de Farhana, ya hay escasez de agentes, por lo que la situación “podría empeorar aún más” durante las vacaciones navideñas.
“En esta infraestructura hay compañeros que hacen turnos de 7:00 a 14:00 horas sin parar ni un instante. Hay de dos a tres agentes, cuando es necesario que pongan un mínimo de cuatro”, detalló. Asimismo, consideró que sería positivo que esta frontera contara con el apoyo de los Agentes de Movilidad de la Policía Local, tal y como se hace en la frontera de Beni Enzar.
Problema endémico
Por otro lado, la AUGC aseguró que la escasez de efectivos se ha vuelto un “problema endémico” en la ciudad autónoma.
“Cada vez que se acerca un periodo de vacaciones, pasa lo mismo”, lamentó uno de los dirigentes de esta organización. “Ya sea en Semana Santa, verano o vacaciones, nos vemos con un 33% menos de agentes”.
Además, afirmó que para compensar la falta de guardias civiles en los pasos fronterizos, se destinan agentes dedicados a labores de seguridad ciudadana en puntos estratégicos de Melilla. “Al final quedan ciertas partes desprotegidas porque no hay efectivos suficientes”, concluyeron.