Pistoletazo de salida para los cultos en honor de Nuestra Señora de la Victoria

La presentación del cartel anunciador el pasado sábado ha dado el pistoletazo de salida a los cultos en honor de la Patrona Coronada de Melilla, Nuestra Señora de la Victoria, que este año ha hecho protagonistas a los jóvenes como un modo de pasar el testigo de la tradición a las nuevas generaciones cristianas de la ciudad.

El cartel, obra de la artista Rocío Ronda, es una composición fotográfica que refleja a la perfección lo que significa la festividad de la Virgen: la iglesia de la Purísima Concepción al fondo y en primer plano una chica ataviada de flamenca que muestra la medalla de la Congregación. Es decir, la casa de Nuestra Señora y su unión con las fiestas patronales que se celebran en septiembre.

El cartel se descubrió al término de un sencillo acto celebrado en la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, donde actualmente se encuentra la imagen de la Virgen de la Victoria entre tanto se llevan a cabo las obras en su sede canóniga habitual, es decir, en la parroquia de Melilla la Vieja. Las primeras autoridades civiles y militares asistieron a esta actividad, que contó con el respaldo de decenas de ciudadanos y de los miembros de las cofradías locales.

Abrió el acto el vicario episcopal, Eduardo Resa, quien destacó el papel de los jóvenes en el devenir de la vida cristiana recordando en ese sentido la participación extraordinaria que tuvieron en el reciente Xacobeo, en el que elaboraron una hermosa alfombra de serrín para participar en esta ceremonia nacional. Resa llamó a los jóvenes a no dejar de vivir en unidad y a dar lozanía y savia fresca a la iglesia. Asimismo, les pidió que no dejen de formarse en la fe cristiana.

Roberto Vargas, presentador del cartel de 2021, fue el encargado de resaltar la figura de los jóvenes elegidos este año para llevar a cabo la presentación: María Milagrosa Reyes y Adrián Aguilar Verdugo, ambos muy ligados desde pequeños a la Real y Franciscana Congregación de Nuestra Señora de la Victoria y que han recogido el testigo y le legado que les dejaron sus respectivos abuelos.

Ambos jóvenes, criados en la fe, resaltaron en sus intervenciones los sentimientos que despiertan la Virgen en ellos, una madre que los cuida y que vela por ellos y a la que siempre piden protección. Ambos recordaron la figura de sus abuelos como referentes en la Congregación y manifestaron su querencia por Nuestra Señora de la Victoria desde que eran muy pequeños.

Por último, se destapó el cartel anunciador de la novena por parte tanto de su autora, Rocío Ronda, como del hermano mayor de la Congregación, Luisma López de la Manzanara, quien entregó los diplomas acreditativos tanto a Ronda como a los presentadores.

Hay que destacar la magnífica interpretación de marchas procesionales que realizaron varios miembros de la Agrupación Musical de Nuestro Padre Jesús de la Flagelación para acompañar a las solistas Olaya Jiménez (violín) y Nerea Galindo (piano) durante el transcurso del acto, que terminó con el himno nacional.