El acusado se declaró culpable en el juicio y la fiscal pidió la pena mínima. A ella, le dio las gracias.
Un hombre, acusado de tráfico de drogas, aprovechó su último turno de palabra en el juicio de ayer para pedir perdón a la juez y a España por haber intentado embarcar con más de 34 kilos de hachís ocultos en su vehículo con destino a la península. Se declaró único culpable del delito contra la salud pública y exculpó a su pareja que viajaba con él el pasado octubre, cuando ambos trataban de embarcar en la Estación Marítima con su vehículo. Aseguró que sabía que llevaba la droga escondida en el coche y con la que pretendía llegar a la península. La joven, por su parte, aseguró desconocer por completo la existencia de la droga.
Dado el reconocimiento de los hechos por el acusado, la fiscal solicitó la pena mínima prevista en el Código Penal para los delitos contra la salud pública: Tres años y un día de prisión. Además, le impuso una multa de 300.000 euros. El abogado defensor del joven acusado aceptó la oferta de la Fiscalía, mientras que el letrado de la joven pidió su absolución, pues ésta desconocía la ‘mercancía’ que llevaban en el vehículo.
El acusado también quiso agradecer a la fiscal que le rebajara la pena que en un principio solicitaba para él.