“Perder en Granada fue lo mejor que pasó”

Ayer por la tarde pasó por la sala de prensa del estadio azulino Dani Barrio, el considerado por muchos mejor portero de la categoría, para analizar el próximo compromiso de la U.D. Melilla en liga: la salida a domicilio de este fin de semana al Nuevo Vivero del C.D. Badajoz.

El guardameta azulino ha agradecido, nada más comenzar su rueda de prensa, el poder regresar ya a su habitual rutina de trabajo. Pasada ya una semana especialmente difícil por la carga de partidos y de viajes, el arquero ve a su equipo centrado “al cien por cien” en el complicado encuentro del domingo en Extremadura.

Hablando de dicho enfrentamiento, cree Barrio que no va a ser “nada fácil” vencer a los blanquinegros. “Conociendo a su entrenador sabemos que nos enfrentaremos a un rival muy intenso y aguerrido, con muy buenos jugadores. En verano, y por nombres, estaba en muchas quinielas para alcanzar los playoff, pero no han arrancado bien y ahora mismo han de estar peleando por otras cosas”, ha señalado. “Ellos querrán despedir el año en casa con una victoria –ha añadido el asturiano-, pero nosotros también saldremos a ganar. Nos queremos traer los tres puntos, pero siempre con la humildad y consciencia de que va a ser muy complicado”.

Los unionistas desconocen el posible estado del terreno de juego pacense, pero evitan las posibles excusas -como siempre-: “Nuestra idea es la misma que tenemos todos los domingos, la de ser protagonistas, llevar el peso del encuentro e intentar potenciar nuestras virtudes conociendo la manera de jugar de nuestro rival”, ha apuntado.

“No tenemos que tener miedo ninguno, hemos demostrado ya que sabemos salir de situaciones complicadas o contratiempos. Viajaremos con optimismo y con la convicción de que, haciendo las cosas bien, estaremos mucho más cerca de sacar los tres puntos” La afición azulina, espoleada por la famosa eliminatoria copera frente al Madrid y la excepcional marcha del equipo, comienza a tomarse algo más en serio a esta escuadra, algo que también parece percibir el vestuario melillense. “Con los 37/48 puntos nos hemos ganado el respeto de nuestra afición, pero también del resto de equipos de la Segunda B”, ha explicado el meta, que aun así sigue demandando una mayor afluencia de público los domingos en casa.

El único lunar de la temporada sigue siendo la derrota 5-1 ante el Recreativo Granada, aunque paradójicamente para el gijonés “es lo mejor que pudo pasarle al equipo”:

“Es difícil hablar de un 5-1 con una sonrisa en la cara, pero la verdad es que nos ha venido muy bien porque un golpe a tiempo siempre te cura de todos los males –ha expresado-. Es fútbol esto, aprendimos el error y no nos ha vuelto a pasar, aunque espero que ya no se repita porque vamos arriba y la exigencia que tiene ir líder es muchísima, todos salen al 120% en contra nuestra. Si tu no sales igual te pueden pintar la cara”.

El portero unionista, un año más, está siendo de los más destacados de la categoría, pero él guarda la humildad de siempre. “Si que es cierto que este año he tenido la suerte de estar bastante acertado en los momentos clave. Al final yo siempre estoy centrado en lo mío, en poder ayudar al equipo al máximo, pero cuanto menos aparezca yo mejor, porque eso hablará bien de todo el colectivo”.

Gran parte de la culpa de ello la tiene ‘Moha’, segundo entrenador y preparador de porteros del club, que se ha convertido en un auténtico especialista en sacar rendimiento a los ocupantes del arco melillense:

“Moha nos tiene bien entrenados, nos da mucha caña y nos tiene muy bien entrenados. Nos coge cada día prácticamente una hora aparte y nos da mucha caña, físicamente y psicológicamente nos maltrata mucho (risas) para ponernos las pilas y que no nos despistemos nunca. Mis cuatro años de aquí son los de mejor rendimiento de mi carrera y gran parte de culpa la tiene Moha”.