Enrique Alcoba encabeza la candidatura alternativa a presidir la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME). Las elecciones no llegan porque tocan sino porque un juez ha dicho que hay que hacerlas. Estas votaciones se han resistido, pero finalmente se celebrarán el próximo 2 de julio.
El propietario de Calzados Rual y presidente de la Asociación de Comerciantes de Melilla (Acome) desde hace 24 años tiene buenas sensaciones, pero sabe que la última palabra la tienen los 66 vocales de la patronal melillense con derecho a voto. Él cuenta con los 17 apoyos de Comercio, los 6 de Hostelería, los del sector del automóvil, talleres, aduana y estibadores del puerto y está dispuesto a atraer a alguno más.
La rivalidad entre la candidatura de Enrique Alcoba y la de Pepe Reyes se sustenta en intereses económicos diferentes. Alcoba representa a los empresarios cuyos negocios dependen del buen funcionamiento de la frontera. Pepe Reyes, heredero de Margarita López Almendáriz, lidera sectores con mayor relación profesional con la Administración: sector limpieza, servicios o construcción.
El enfrentamiento entre ambos bloques de la patronal melillense viene de 2018, cuando Enrique Alcoba retiró su candidatura a las elecciones de la CEME tras dar cuenta ante notario de supuestas irregularidades cometidas en el proceso electoral. En octubre pasado, un juez le dio la razón y anuló las decisiones tomadas por la CEME desde septiembre de 2018. En teoría las elecciones debieron celebrarse entre enero y febrero de este año, pero se han hecho de rogar. Finalmente se celebrarán el 2 de julio. Sin ir más lejos, hoy cierra el plazo para presentar alguna otra candidatura.
Alcoba llega a estas elecciones convencido de que la mayoría de los empresarios de la ciudad no se sienten representados en la actual CEME. No es ilegítimo ni mucho menos. Pero no representa los intereses de los emprendedores que hacen caja con los ojos puestos en la frontera. De ahí que secunden esta candidatura rostros conocidos del empresariado local como José Luis Martínez, Antonio Mena o Chakib Mohamed, entre otros.
Los integrantes de esta candidatura alternativa han decidido acudir a estos comicios con una estrategia sustentada en objetivos muy claros. El primero de ellos, incorporar a las agencias de viaje, panaderías o empresas tecnológicas a la patronal. También apuestan por trabajar en la captación de cruceros y barcos grandes; buscar nuevas vías de mercado con Argelia y en enfocar la labor del Patronato de Turismo en la atracción de clientes de Andalucía y Marruecos, priorizando la cercanía geográfica. A estas alturas, ellos y nosotros estamos convencidos de que ir a ferias de Turismo en Miami o Alemania no ha dado los frutos esperados durante los últimos 20 años.
Esta candidatura también se ha puesto como prioridad conseguir que el descuento del 75% en el billete de barco o avión pueda aplicarse no sólo a los melillenses y sus familiares sino también a quienes tienen algún tipo de vinculación con Melilla porque, por ejemplo, han hecho aquí la mili o han nacido aquí de manera accidental y llevan años sin pisar esta tierra.
Los medios de comunicación afrontamos estas elecciones como si fuera una campaña política. Nada más lejos de la realidad. Aquí hay 66 vocales con derecho a voto y a estas alturas digamos que la capacidad de influencia está en un 50-50. No está todo el pescado vendido. La gente quiere ir a votar.
Después de 24 años al frente de Acome, haciendo declaraciones a la prensa, Alcoba tiene claro que gane quien gane, después de estas elecciones los empresarios de Melilla tienen que trabajar todos juntos por un objetivo común: salir de la crisis.
Es una pena que la patronal melillense esté profundamente dividida. Si hace unos años, salíamos a la calle a protestar porque “Melilla se muere”, ¿con qué mensaje deberíamos salir en estos momentos?
No hay que ser brillante ni aventajado para entender que necesitamos que gane quien gane las elecciones se comprometa a hacer un esfuerzo por aunar esfuerzos para unir al empresariado local. No podemos mantener la patronal partida en dos. No es bueno para nadie, pero especialmente, no es bueno para Melilla. Hay que intentar luchar por los intereses mayoritarios que son, ni más ni menos, los de esta ciudad.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…