Papá Noel ha repartido la ilusión entre los niños de Melilla. Su trabajo ya está hecho, esta madrugada cientos de hogares melillenses recibieron su visita sigilosa por la noche, que colmó de regalos a los más pequeños.
Durante la mañana de Navidad, muchos de ellos han salido a las calles a disfrutar de sus regalos en compañía de amigos. El buen tiempo casi primaveral, con temperaturas que han rozado los 20 días, ha acompañado durante la jornada y ha propiciado que las familias salieran a dar un paseo y a estrenar las sorpresas que Papá Noel dejó junto al árbol.
Esta Navidad hemos podido ver a muchos melillenses con sus nuevas bicicletas, monopanines y juguetes en la Plaza de las Culturas o en el Parque Hernández.
Es el caso de Matias, a este pequeño le han dejado un cohete espacial montable de más de mil piezas para que pudiera entretenerse en construirlo. “Me gusta mucho construir”, explicó. Tanto que no es la primera vez que lo hará, ya que como contó, en otras ocasiones ha montado coches, naves y “muchas cosas”. “Soy un experto”, aseguró a este diario. Junto a él se encontraban Diego y Daniel, dos de sus primos con los que estaba jugando.
“Yo le pedí a Papá Noel un coche y me lo ha traído”, señaló Daniel. Pero no uno, sino unos cuantos, ya que según apuntó se ha portado muy bien este año por lo que seguro que le han recompensado.
A su otro primo, Diego, también le han dejado muchas sorpresas bajo el árbol de Navidad. Según explicó a El Faro, Papá Noel le había traído un gran peluche de Spiderman y una figurita de Buzz Lightyear, el personaje de la conocida película de Pixar ‘Toy Story’. Este pequeño estaba muy contento ya que es un gran seguidor de Spiderman y Santa Clauss se había portado muy bien con él cumpliendo sus deseos.
“Nos lo estamos pasando muy bien jugando juntos”, recalcaron los pequeños que además estaban muy entretenidos haciéndolo junto a sus padres. Pero el día de diversión no iba a acabar aquí ya que por la tarde le esperaban muchos más planes junto a sus amigos y más regalos. “Después con nuestros amigos vamos a ir al Parque Forestal a jugar y además nos van a dar más regalos”, vaticinó Matías.
Para Mía y Gala, dos pequeñas melillenses, la mañana ha estado colmada de regalos. Tal y como ha explicado a El Faro su madre, a Mía Papá Noel le ha dejado unos puzzles de la Patrulla Canina, un disfraz de la Capitana Marvel y un videojuego también de la Patrulla Canina para la Nintendo Switch.
A Gala, que es un poco más pequeña, le han dejado un mando de la tele con música, un juego de apilables y encajables y un set con todo tipo de instrumentos de música como una pandereta, maracas, triángulo o un puño de cascabeles. Regalos con los que han estado jugando en familia toda la mañana.
Los tiempos parece que están cambiando poco a poco en Melilla. Esta Navidad se han visto menos regalos tradicionales que otros años como son las típicas bicicletas, pelotas o patines, con los que solían salir a las calles los niños, y más juegos de mesa, puzzles o tecnología.
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