Siete asociaciones del país vecino denuncian “una guerra contra los subsaharianos”. Un total de siete organizaciones humanitarias marroquíes denunciaron ayer en Rabat la “creciente” expulsión de inmigrantes subsaharianos del país vecino en las últimas semanas.Asimismo, reprocharon la criminalización de este colectivo en algunos medios de comunicación del reino alauita.
Como ejemplo, señalaron que en su última edición, el semanario marroquí MarocHebdo tituló en su portaba ‘El peligro negro’, en referencia a que los subsaharianos eran “un peligro humano y para la seguridad del Estado”. Asimismo, indicaron que el fin de semana pasado un artículo del diario Al Jabar tituló ‘Africanas extienden el SIDA entre los marroquíes’.
Hicham Rachidi, miembro del Grupo Antiracista de Acompañamiento y de Defensa de los Extranjeros y Mirantes (GADEM) consideró que esta “represión” se produce en un contexto “de guerra contra los inmigrantes comandada por Europa”.
Además, las ONGs denunciaron la detención del coordinador del Consejo de Migrantes Subsaharianos en Marruecos (CMSM), Camara Laye, arrestado el pasado 20 de octubre y acusado de “venta y posesión ilícita de alcohol y tabaco de contrabando”, una acusación que consideraron “ficticia”.
Según cifras oficiales recientes, Marruecos rescató a 6.500 emigrantes ilegales en alta mar en los últimos cinco años y ha detenido a otros 23.000. Los subsaharianos se refugian en varias ciudades del país vecino, como Oujda, Nador, Fez o Casablanca y son habitualmente detenidos por la policía y llevados hasta la frontera con Argelia, pero suelen regresar, por lo que a veces las mismas personas son expulsadas varias veces.