El frágil sistema sanitario de Melilla se está poniendo a prueba con la crisis del coronavirus. Octubre ha sido el mes en que más casos positivos se han notificado, pero también en el que el hospital Comarcal ha sentido la presión hospitalaria.
El mes inició con un 6,21% de ocupación de camas COVID y un 16,67% de ocupación de camas UCI COVID, según el informe del Ministerio de Sanidad número 220, que recoge los datos del 1 de octubre. En ese momento, según Sanidad, Melilla estaba por debajo de la media nacional en ocupación de camas COVID que era de 8,77%; y en camas UCI superaba ligeramente la media del país, que era de 17,99% y se encontraba lejos de Madrid, que era la región con mayor presión hospitalaria en la UCI con un 42,61%.
Melilla arrancó el mes con 382 casos de coronavirus activo, 12 personas ingresadas en el hospital Comarcal de las cuales dos se encontraban en la Unidad de Cuidados Intensivos. El incremento exponencial de la tasa de contagios ha hecho que con el paso de los días cada vez más personas hayan necesitado su ingreso en el centro de salud y, algunos de ellos, han requerido ser pasados a la UCI.
A principios de mes, la incidencia acumulada (número de casos por cada 100.000 habitantes) en la ciudad en los últimos 14 días era de 463,65, cerca del umbral marcado por el Ministerio de Sanidad para tomar medidas restrictivas, y la tasa de positividad era de 21,5%, único baremo, de los tres estipulados, que cumplía Melilla para aplicar nuevas normas.
Con el paso de los días, el número de casos positivos notificados ha ido aumentando, así como los pacientes hospitalizados llegando a un pico de 54 personas ingresadas en el hospital, de las cuales nueve se encontraban en la Unidad de Cuidados Intensivos. Ocurrió el pasado 27 de octubre.
La actualización 240 del Ministerio de Sanidad, que recoge los datos hasta el 30 de octubre, señala que la ocupación de camas UCI COVID en Melilla aumentó hasta llegar al 64,29% con nueve pacientes en esta área, mientras que la ocupación de camas COVID era 28,49%, siendo la región del país donde hay mayor presión hospitalaria.
Son los dos umbrales más altos de España, ambos muy por encima de la media nacional.
La presión hospitalaria ha sido tal, que se prevé la instalación de un hospital de campaña, así como ampliar con tres camas UCI la disponibilidad en la ciudad, que cuenta con 14 camas de la Unidad de Cuidados Intensivos hasta la fecha. Desde el Ejecutivo de la Ciudad también han solicitado el arribo del buque Galicia para reforzar la capacidad hospitalaria de la ciudad, ya que dispone de un hospital abordo para desarrollar funciones de asistencia primaria y de estabilización; cuenta con ocho camas UCI, dos quirófanos, una sala de triaje, entre otros.
El Sindicato Médico de Melilla asegura, en un comunicado, que el sistema hospitalario de la ciudad ya colapsó, y el presidente de Melilla, Eduardo de Castro, afirmaba la semana pasada que estaba “al límite”.
Ya a mediados de septiembre, el Sindicato Médico de Melilla advertía de la presión hospitalaria A fecha del 15 de septiembre, la incidencia acumulada en la ciudad era de 185 nuevos casos semanales por cada 100.000 habitantes, una tasa claramente superior a la media española y la UCI melillense presentaba una ocupación del 57% de las camas previstas para COVID. “Estas cifras implican que, desde ya, hay que aplicar todas las medidas que nos permita el Estado de Derecho, para evitar el desastre y que pasan, no por confinamientos globales, sino por la precisión quirúrgica de las medidas”, indicaron en esa oportunidad por medio de un comunicado de prensa.
El consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohand, informaba hace unas semanas de que Melilla estaba en una situación de riesgo 4 con los nuevos parámetros del Ministerio de Sanidad y advertía de que estábamos a un paso del confinamiento perimetral.
Hace dos semanas tanto la cultura como la hostelería bajaron las persianas, en vista de que Melilla tiene una transmisión comunitaria generalizada. El consejero explicó que en pleno de control del pasado viernes que al haber transmisión generalizada hay múltiples “vectores” de transmisión del virus.
Melilla ya cuenta restricciones para salir y entrar en la ciudad y este sábado, por medio de una carta, el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, solicitó a Sanidad valorar aplicar la medida de confinamiento domiciliario, así como la suspensión de clases presenciales.
La Ciudad adjudicó dos contratos de tramitación de emergencia para la compra de mascarillas homologadas reutilizables con tres capas de protección para uso en colegios de educación infantil, primaria y especial de Melilla y otro de suministro de garrafas de 5 litros de gel hidroalcóholico para higienización de las manos en colegios de la ciudad.
Entre los dos contratos, la Ciudad ha destinado más de 180.000 euros con el fin de garantizar el material higiénico sanitario para los centros escolares de la ciudad.
El contrato de suministro de mascarillas fue adjudicado el pasado viernes y tiene un plazo de ejecución de 10 días; mientras que la segunda contratación referente al suministro de gel hidroalcohólico fue adjudicada en la misma fecha y tiene un plazo de ejecución de seis días.
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