Política

Objetivo: evitar una alta abstención

El domingo de elecciones al Parlamento Europeo ha comenzado muy tranquilo, soleado y con una pizca de viento, sin problemas en ninguna de las 70 mesas de los 23 colegios electorales de Melilla. Un total de 55.725 ciudadanos tienen derecho a votar entre las 9:00 y las 20:00 horas.

Poco antes de la apertura del colegio situado en el centro asociado de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) dos personas han preguntado en la puerta para votar allí porque pensaban que era La Salle y los apoderados e interventores las han mandado un poco más arriba.

Una preocupación de estos comicios es la presumible alta abstención, por lo que muchas de las personas con las que ha hablado El Faro han hecho hincapié en la importancia de que la gente acuda a votar.

Ciertamente no había mucha gente a primera hora allí. Una de las primeras ha sido Ana María Ramírez, a quien no le ha importado desvelar –abriendo el sobre incluso- que su voto iba a ser para Vox.

Tras ejercer su derecho en el mismo sitio, tal como había hecho Ana María, Francisco Jesús Gálvez ha deseado que los ciudadanos voten, porque “es una jornada importante”, Aunque, como bien es sabido, habitualmente las elecciones europeas tienen menos participación que las nacionales o que las autonómicas y locales, este ciudadano cree que “es una jornada importante” en la que “nos jugamos mucho”. De ahí que haya animado a ejercer este derecho democrático.

Si la tranquilidad reinaba en la UNED, lo mismo se podría decir del colegio La Salle. A las 9:40 horas, en una mesa, la presidenta de grupo, Sumi Mohamed, confiaba en que durante el día hubiera mayor afluencia de la habida hasta ese momento, que había sido muy baja.

Su compañera Soraya Sel-Lam deseaba que el día resultara “ameno” y pasara “rapidito” y que la gente fuera a votar -“que es muy importante”-.

Bien es cierto que, en este centro, hubo dos mesas a las que no se presentaron titulares ni suplentes, pero fueron conformadas por suplentes del resto de las mesas y la jornada se desarrolló sin mayor complicación.

Muy cerca, en el CEIP Encarna León, Mohamed Murud ha recomendado a los ciudadanos no sólo que acudan a las urnas, sino que voten por el PSOE, que, en su opinión, es “el mejor partido”.

Pese a que aún era temprano, dominaba la sensación era de escasa afluencia, y José Luis Tejada, un hombre que votó a media mañana en el CEIP Reyes Católicos, confiaba en que la gente –a quien veía “un poco más concienciada”- se iba a movilizar algo más, teniendo en cuenta que la participación en estos comicios nunca ha sido demasiado alta.

Sin embargo, las cifras han ido desmintiendo sus previsiones. A las 14:00 horas, la participación era de 8.748 personas, un 16,13 por ciento del censo, lo que suponía 8,89 puntos menos que en los anteriores comicios, celebrados en 2019, cuando habían votado a esa hora 13.565 personas, el 25,02 por ciento.

A las 18:00 horas, un 23,96 por ciento de los ciudadanos melillenses llamados a las urnas habían ejercido su derecho a voto. La cifra suponía un total de 13.368 votantes a esa hora de la tarde, cuando quedaban dos horas para el cierre de los colegios electorales en la ciudad autónoma.

Continuaba, por tanto, siendo una participación baja, ya que eran 17,92 puntos menos que en las anteriores elecciones europeas, celebradas en 2019, cuando a media tarde habían votado 22.709 personas, o, lo que es lo mismo, 9.341 ciudadanos más. Era entonces un 41,88 por ciento de los electores.

En el conjunto de España tampoco está habiendo una participación masiva, pues a las 18:00 horas era del 38,35 por ciento, 11,09 puntos menos que en 2019.

Poco antes del cierre de los colegios electorales, en el CEIP España (Infrantil), María Dolores Gavilán, quien salía de votar junto a un hombre, ha comentado que la jornada estana siendo, en su opinión, "demasiado tranquila". Según cree ella, "sobre todo, la gente mayor no le da importancia a las elecciones europeas y, si a eso le sumamos el día tan bueno que hace, la gente acaba yéndose a la playa".

También allí había una señora, Mari Carmen Sánchez, que, pese a todo, pensaba que podrían ser "imaginaciones" suyas, pero que su "impresión" era que la gente estaba participando más que en otras elecciones europeas. En cualquier caso, su deseo era que, "salga quien salga, ayude al país".

 

Al cierre de los colegios electorales, a las 20:00 horas, Melilla no ha registrado ninguna incidencia significativa según ha informado la Delegación del Gobierno.

Así lo ha confirmado también el presidente de la Junta Electoral de Zona, Miguel Ángel García Gutiérrez, quien ha manifestado que "todo ha sido bastante tranquilo" quitando lo sucedido en La Salle, que se pudo solventar con facilidad. También ha informado de que alrededor de 15 personas han llamado para solicitar el servicio de taxis y ambulancias para poder acudir a su colegio electoral.

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