Uno de los jugadores locales, en una de las jugadas del partido de ayer
El CF Rusadir tendrá que esperar una semana más para intentar salir de los puestos de descenso que ocupa. La escuadra colegial desaprovechó el factor campo para retornar a la senda del triunfo ante un rival que se mostró muy práctico y eficaz para llevarse un triunfo muy trabajado en la jornada de ayer.
La primera mitad resultaba muy disputada entre dos equipos que buscaron desde el inicio hacerse con la posesión de la pelota, por lo que la pelea en la parcela ancha fue intensa. Ninguno lo conseguía. El partido fue un toma y daca constante hasta que bien avanzado el periodo los visitantes comenzaron a tener más presencia en campo local, y fruto de ello llegaba el gol que les daba ventaja al descanso.
El Rusadir fue el primero que pudo desnivelar la contienda en una acción ofensiva por banda derecha en la que Abdu centraba al segundo palo donde aparecía Symo para conectar un disparo que se estrellaba en el lateral de la red. La réplica tardaría en llegar. Al filo de la media hora de juego, Víctor, el más peligroso de los visitantes en ataque, culminaba una contra almeriense con un disparo raso desde la frontal del área que se marchaba fuera junto a la cepa del palo izquierdo del portal defendido por José.
El Almería presionaba la salida del balón de los locales y recuperaba pronto la pelota. Eran momentos de dominio rojiblanco -ayer de azul- y una subida hasta la cocina del lateral diestro Yeray acababa con un centro medido al segundo palo donde aparecía Víctor para enviar el cuero a la red de perfecto testarazo.
Los colegiales pudieron conseguir la igualada apenas dos minutos después en una buena acción individual de Fran dentro del área, pero el centro raso del '7' rojinegro se paseaba por la línea de gol sin encontrar rematador. Casi a renglón seguido José evitaba el 0-2 con una gran intervención a disparo de Cato, que culminaba una contra guiada por Piedra.
Tras el paso por los vestuarios el Rusadir daba un paso al frente en busca del empate. Los de Ahmed Dris rondaban con más frecuencia el área almeriense, aunque sin acierto de cara a la portería contraria.
El Almería aprovechaba los espacios dejados en defensa para montar rápidos contraataques y en uno de ellos Cato se marchaba en velocidad y batía a José, poniendo tierra de por medio en el electrónico.
Los locales pudieron acortar distancias casi a renglón seguido tras un agarrón de un defensor visitante dentro del área a Mizzian. El colegiado, muy cerca de la jugada, decretaba el correspondiente penalti. Symo era el encargado de ejecutar la pena máxima con un disparo potente y colocado al palo izquierdo, pero el meta visitante José Antonio realizaba la parada de la mañana enviando el cuero a córner.
El partido seguía abierto y poco después de nuevo José tenía que emplearse a fondo para salvar un gol cantado al ganarle el mano a mano al rojiblanco Cato. Los locales no arrojaron nunca la toalla y Symo botaba un libre directo desde el balcón del área que se estrellaba en la barrera, el rechace lo recogía Fran que disparaba alto.
De ahí hasta el final los colegiales lo intentaron más con el corazón que con la cabeza ante un Almería B que supo nadar y guardar la ropa.
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