Ya ha entrado en vigor la nueva Ley de Seguridad Vial, que introduce numerosos cambios tendentes a mejorar el tránsito de vehículos en las carreteras y a simplificar el procedimiento sancionador.
Con la nueva ley se intenta evitar la impunidad de algunos conductores infractores y hacer el procedimiento sancionador más ágil y sencillo para el ciudadano, de modo que éste conozca en todo momento y cuanto antes la infracción cometida y pueda elegir entre las opciones que le ofrece la Administración: recurrir o pagar.
En nuestra ciudad, la actividad sancionadora contra el conductor de vehículos es intensa, en gran medida por la falta de aparcamientos, que obliga a incurrir en infracciones muchas veces por un exceso de comodidad a la hora de intentar dejar el coche lo más cerca posible del lugar al que se acude y, otras, por necesidad ante la falta de tiempo y el déficit de aparcamientos..
No obstante, existen infracciones mucho más graves, como la de conducir hablando por el móvil, que requieren de la debida y dura sanción hasta que se impongan hábitos más seguros para el conjunto de la circulación vial.
Esperemos que la nueva norma contribuya a crear una mayor conciencia en los conductores y sirva para rebajar las infracciones que se cometen a diario.