Muchos profesores asistieron ayer a la concentración en la plaza Menéndez Pelayo. Enrique es uno de ellos. Explicó a El Faro que cada año tiene que dar más horas de clase, que se suman a las que hay que utilizar para preparar las lecciones. Además, apuntó que tiene mucho trabajo burocrático de informes que hacer para a la administración que le restan tiempo para dedicar a su labor de enseñanza. Asimismo, indicó que su centro recibe un 50% menos de inversión respecto a hace varios años.
“Nos tienen que dar herramientas para que podamos educar en valores”, afirmó Laura, otra profesora que acudió a la protesta. Aseveró que todos sus compañeros son muy buenos profesionales, pero que les tienen que dejar realizar su función disminuyendo el número de estudiantes que hay en las aulas.
Educar para salir adelante
Marisol Galán, miembro de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) y docente en un IES, indicó que no importaba el signo político, sino la necesidad de salir a la calle para exigir mejoras educativas. “Estamos convencidos de que entre todos podemos cambiar la situación”, afirmó.
Galán se mostró contraria a la Lomce. Aseveró que “si queremos que un país salga adelante, hay que empezar por la Educación”.
Pedro, otro maestro de la ciudad, resaltó que es un momento importante para manifestarse en contra de los recortes y de la Lomce. Subrayó que estaba allí porque “la educación pública está sufriendo ataques y deterioros”.
No se da respuesta
También estaba entre los manifestantes Sonia, profesora en un IES de la ciudad. Explicó que “el Estado no está dando respuesta” a las necesidades de la comunidad educativa. Lamentó que no se haya iniciado aún con el Pacto por la Educación del que hablan los políticos y que la derogación de la Lomce siga en el aire.
“Estamos aquí luchando por nuestros niños y por los del futuro porque a este paso sólo las clases privilegiadas van a poder estudiar”, añadió.
En el caso de Carmen, lo que le llevó a manifestarse fue sus condiciones de trabajo. Es intérprete de lengua de signos y afirma la situación de este colectivo es precaria. Están en una bolsa de trabajo, pero se les contrata de forma intermitente, es decir, un año sí y otro no.
Por último, Marta, una alumna de primero de Bachillerato, acudió a la concentración con un grupo de amigos. Afirmó que hacen falta más becas. Señaló que espera que desaparezcan las reválidas porque no quiere jugarse en un examen el trabajo de años en el instituto cuando eso va a determinar su futuro. Aseveró que es preciso recuperar las manifestaciones de antaño.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…