Mohamed El Haidri ha obtenido un 9,6 en las PAU. Quiere estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones.
Las horas de estudio a veces tienen su recompensa. Mohamed El Haidri apenas podía creerse el martes por la noche que su nota de Selectividad de este año era la mejor de toda la ciudad. Este estudiante de Bachillerato del IES Leopoldo Queipo se enteró de la noticia a través de las redes sociales. El director provincial, José Manuel Calzado, publicó en su cuenta de Twitter la lista de los alumnos con mejores calificaciones de las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) y ésta estaba encabezada por el joven, que al principio dudó de que fuera cierto.
Sin embargo, tras la sorpresa, Mohamed El Haidri se dio cuenta de que lo que estaba viendo era cierto y que realmente se había convertido en el mejor estudiante de 2º de Bachillerato de la ciudad.
El futuro universitario aseguró, en declaraciones a El Faro, que cuando salió de los exámenes no pensó en ningún momento que las calificaciones pudieran ser tan buenas. Es más, El Haidri apuntó, entre risas, que precisamente la prueba que peor había hecho, la de Química, fue finalmente en la que mejor nota obtuvo.
Durante toda la jornada de ayer su teléfono no paró de sonar. Amigos, familiares y profesores querían ser los primeros en darle la enhorabuena por su trabajo, pero para conseguir esto el estudiante ha tenido que dedicar muchas horas a estudiar antes de llegar a los exámenes.
El Haidri reconoció que sus calificaciones ya eran buenas en el Bachillerato y que se había preparado a conciencia los exámenes de Selectividad. Pero también aseguró que es de los que deja la mayor carga de trabajo para el último momento y apuntó que obtener buenas notas no está reñido con divertirse y tener tiempo libre para disfrutar con sus amigos.
Su objetivo ahora es estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones en la Universidad de Málaga. El joven es consciente de que la situación económica y el mercado laboral no atraviesa su mejor momento. Pero él lo tiene claro, seguirá formándose para poder tener más posibilidades de lograr un buen puesto de trabajo. “Estudiaré hasta que la situación mejore”, argumentó.
Su padre, un comerciante jubilado, que lo acompañó ayer por la mañana a visitar al director del instituto, no podía ocultar su felicidad y orgullo al ver que su hijo había conseguido la mejor nota de Selectividad de la ciudad.
Junto a él, Esther Wahnon del Enrique Nieto, Chaira Mahraoui del Miguel Fernández, Ecran Aissoui del Rusadir, Lin Kian de la Escuela de Arte, Marina Fernández del Buen Consejo y José María Gil, del Juan Antonio Fernández, han sido los estudiantes con mejores calificaciones de las PAU de este año en Melilla en cada uno de sus centros.
Ahora les espera la Universidad y después, con suerte, un mercado laboral mejor que el actual y con más oportunidades.