Todos andamos preocupados por la vuelta al colegio estos días. Es bueno que los alumnos acudan de manera presencial a las aulas, porque no es lo mismo aprender en primera persona que a distancia, eso está claro. Además, está el tema de las relaciones sociales, tan importantes y más hoy en día cuando los niños ya apenas juegan en las calles y solo se relacionan con otros niños en momentos puntuales.
Por eso, que vuelvan a clase. Son los adultos los que han de velar porque ese retorno sea lo más seguro posible y que no tengamos que lamentar un pico de casos en pocos días.
Es importante extremar las prevenciones y asegurarse de que los niños las cumplen. También es fundamental insistir en la no asistencia en caso de síntomas, en el estricto desarrollo de los aislamientos y en el cierre de aulas cuando sea necesario.
Es fundamental, como no nos cansamos de recordar cada vez que tenemos ocasión, apostar por la vacunación. No todos los niños en Melilla tienen alguna dosis puesta, por lo que aún queda camino por andar en este recorrido. Las administraciones deberían colaborarán en promocionar este tema, explicar a los ciudadanos la importancia de que los menores están vacunados y llegar al máximo posible de padres.
Todos debemos de colaborar en este asunto, porque nos afecta, de una u otra manera, a cada uno de nosotros. Primero por el covid, como es prioridad por las circunstancias. Pero también por el futuro de la ciudad. Porque asegurar a nuestros hijos una educación presencial es vital si queremos formar a personas que prosperen y tomen decisiones el día de mañana, cuando sean ellos los adultos.
Además, es importante recordar en que situación se encuentra la ciudad. El número de casos activos roza los 2.000 y cada día que pasa se suman nuevos contagios. El efecto de las fiestas navideñas aún tiene recorrido y es esperable que los casos repunten a lo largo de los próximos días.
No podemos olvidar tampoco que la variante ómicron gana terreno a la delta, lo que implica una mayor transmisión del virus aunque sus efectos sea más leves.
Aún queda sexta ola por delante y mientras nos encontremos en esta situación debemos seguir siendo responsables y mantener las recomendaciones sanitarias. Seguimos en riesgo y eso no podemos obviarlo.