Una familia ha denunciado al hospital por un “homicidio por imprudencia” y “mala praxis” tras la muerte de una mujer de 35 años al someterse a una cesárea. Touria estaba de nueve meses e iba a dar a luz a su segundo hijo. Sin embargo, el parto se complicó y, como aseguró a El Faro su marido, Hernán Cerquera, fue trasladada del paritorio hasta el quirófano para que le practicaran una cesárea. Ingresó a las 18:00 horas del sábado en el Comarcal con dolores normales en un parto. Fue por la noche cuando le practicaron la cesárea y en la madrugada del sábado al domingo fue intervenida para extirparle el útero porque no paraba de sangrar. Pero no mejoró tras esta operación y finalmente murió el domingo a las 7:30 horas. Cerquera indicó que el ginecólogo que atendió a su mujer salió a la media hora de iniciarse la cesárea y le dijo que el bebé estaba bien, pero que le habían hecho un corte en la cara con el bisturí.
El marido de Touria presentó ayer por la tarde una denuncia en los juzgados de guardia de la ciudad contra el hospital. Cree que pudo haber “mala praxis” en la atención a su mujer y solicita al juzgado que dicte una autopsia por parte de un forense independiente a los especialistas del Comarcal porque no se fía de los resultados que le puedan dar en el centro hospitalario.
Duda de la autopsia que le hagan en el hospital porque ayer fue a recoger el cuerpo de su mujer para enterrarla en el cementerio musulmán tras la oración de las 14:00 horas y le dijeron que ya se habían practicado todas las pruebas.
No pudieron preparar el cuerpo para el entierro a mediodía y lo dejaron para proceder tras la oración de las 18:00 horas, aseguró Cerquera. Sin embargo, en ese periodo de espera en el cementerio, recibió una llamada del Comarcal comunicándole que no le habían practicado la autopsia al cuerpo de su mujer. De esta forma, el marido, acompañado de los enterradores, devolvieron el cadáver al hospital para que le hicieran estas pruebas.
Tras este suceso, Cerquera no confía en el Comarcal y, en compañía del abogado Ignacio Gavilán, fue al juzgado de guardia para denunciar al hospital por presunta “mala praxis”, solicitar que no se produzca la sepultura de su mujer y exigir que se haga una autopsia detallada por parte de un médico forense independiente.
Para Cerquera y Gavilán, el hecho del que el bebé tenga un corte en la cara producido por un bisturí es una muestra de que las cosas no se hicieron bien en el quirófano.
Ahora está ingresado en el Comarcal, aunque se encuentra bien de salud. De hecho, el marido de Touria explicó que le han revisado dos pediatras y otros especialistas para comprobar que este corte no le había producido más daños.
Cerquera explicó que el sábado por la tarde, tras nueve meses de un embarazo sin problemas y estando su mujer con buena salud, Touria comenzó con los dolores de parto el sábado a las 18:00 horas. Era su segundo alumbramiento, ya que ambos tienen en común una niña de 16 meses.
En un principio la llevan al paritorio, según su marido. Sin embargo, le dicen que el bebé es muy grande y que no va a poder salir, por lo que los médicos optan por trasladarla al quirófano para practicarle una cesárea.
Cerquera indicó que estuvieron unos quince minutos esperando en la puerta de la zona de cirugía. Aseveró que su mujer se retorcía de dolor, pero al comentarlo con el anestesista, éste le dijo que era algo normal.
Afirmó que a los 20 minutos de entrar en el quirófano salió el ginecólogo y le dijo que el bebé tenía un corte por el bisturí en la cara que se había producido mientras practicaban la cesárea. Pasaron otros 20 minutos más hasta que volvió a salir para decirle que su mujer estaba “grave” y que “perdía mucha sangre”. Destacó que el ginecólogo le dijo: “Lo veo mal”.
Cerquera resaltó que trasladaron a su mujer a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde llegaron a ponerle hasta diez bolsas de sangre.
Sobre las 1:30 horas de la madrugada del sábado al domingo le dijeron que no paraba de sangrar y que si seguía así le iban a tener que extirpar el útero. El marido aseveró que accedió porque lo importante era salvarle la vida a su mujer. A las 2:00 horas volvió a ingresar en el quirófano para proceder a esta operación.
Cerquera aseguró que los médicos le dijeron que al extirparle el útero dejaría de sangrar. Sin embargo, no fue así. Cuando la trasladaron de nuevo a la UCI pudo ver a su mujer: estaba blanca. “Parecía que estaba muerta”, afirmó.
Fue a las 7:30 horas del domingo cuando le comunicaron que su mujer había fallecido.
El marido de Touria volvió por la tarde a la UCI para pedirle a los médicos que le hicieran una autopsia a su mujer porque quería conocer la causa de su muerte. Como no estaba el médico que le atendió de madrugada, otro le hizo un documento para que ayer a primera hora de la mañana lo entregase en la Dirección del Comarcal. Sobre las 9:00 horas de ayer fue al hospital y habló con la Dirección y firmó el documento para que le hicieran esas pruebas.
Cerquera indicó que la Dirección le dijo que para las 13:00 horas estarían terminadas las pruebas y se podría llevar el cuerpo de su mujer para enterrarlo tras el rezo de mediodía. Pero no fue así. Tuvo que devolver el cadáver de su mujer por la tarde porque se lo entregaron sin hacerle la autopsia.
El Ingesa aseguró ayer a El Faro que lamentaba profundamente el fallecimiento de Touria, la mujer que murió el pasado domingo tras una cesárea. Destacó que se ha abierto un procedimiento informativo interno para conocer qué pasó. No obstante, indicó que, como la familia de la fallecida ha interpuesto una denuncia en los juzgados, no se puede pronunciar más sobre este caso.
El abogado de Hernán Cerquera, Ignacio Gavilán, aseguró ayer a El Faro que “el hospital no ha dado parte al juzgado de la muerte de Touria” y que ha sido de forma “intencionada” porque “hay muchos antecedentes” de casos de “mala praxis” relacionados con el área de paritorio y quirófano. Gavilán subrayó que el embarazo de Touria no era de riesgo ni tenía problemas de salud. Subrayó que era su segundo alumbramiento, ya que tiene una niña de 16 meses que nació sin problemas. Para el abogado, el hecho de que el bebé sufriera un corte en la cara con el bisturí no es algo normal ni habitual y, por lo tanto, cree que hubo una presunta “mala praxis” a la hora de practicarle la cesárea y que eso derivó en que Touria no parara de sangrar durante toda la madrugada y, finalmente, falleciera.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…