Ceuta informaba esta semana pasada de que suspendía la celebración del Aid El Kebir. Pero Melilla se desmarca de la ciudad hermana y sí permitirá la Pascua del Sacrificio. El consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, no dejaba hoy dudas de esto. Melilla celebrará la Pascua Grande. Eso sí, habrá dos medidas: no se podrá celebrar el rezo colectivo, para evitar aglomeraciones; y además se prevé la instalación de más carpas de sacrificio en espacios públicos para también reducir el número de personas que puedan coincidir para el sacrificio del cordero. Esto último fue confirmado a El Faro por la Consejería de Políticas Sociales que lleva las competencias de Salud Pública.
Mohamed Mohand aseveró que se ha reunido ya en varias ocasiones con los ganaderos de Melilla, así como su equipo de Salud Pública y ha tenido comunicaciones con los miembros de la Comisión Islámica. Afirmó que ahora mismo no tiene ningún dato para prohibir el Aid El Kebir, cuando se trata de una fiesta que se desarrolla en el ámbito familiar y no en la calle.
No obstante, indicó que la Fiesta del Sacrificio se prevé para finales de julio y quedaría aún para esa fecha un mes y diez días para ver cómo evoluciona la situación sanitaria en la ciudad.
El consejero de Políticas Sociales argumentó que el Aid El Kebir se vive en el núcleo familiar y no hay “peligro de aglomeración ni está llamada a salir a la calle”.
De hecho, subrayó que le iba a resultar muy complejo y “difícil” explicar a los ciudadanos que para esa fecha, los musulmanes melillenses no puedan celebrar esta fiesta y, en cambio, si se casaran podrían contar con hasta 500 personas en la boda.
Por ello, remarcó que “a día de hoy no contemplo la suspensión bajo ningún concepto de la Fiesta del Sacrificio” e insistió en la palabra “hoy” porque indicó que se debe tener en cuenta la situación actual de crisis sanitaria.
Mohamed Mohand reconoció que otra cosa es hacer un rezo colectivo. Indicó que eso implica una aglomeración de personas y no se podrá permitir.
No obstante, cree que la comunidad musulmana lo entenderá como hasta ahora ha comprendido que no hubiera rezo colectivo en la fiesta del Final de Ramadán. Pero aseveró que es un elemento diferente a que se pueda hacer la Pascua del Sacrificio en el ámbito familiar.
Por otro lado, el consejero de Políticas Sociales expresó que tiene el deseo de que “en nuestra ciudad no haya ningún tipo de debate ni discusión” entre vecinos sobre por qué se celebra una fiesta y no otra. “Que no nos peleemos entre nosotros sobre si se celebra una cosa u otra y que no entremos en esos debates porque no aportarán nada”, aseveró. En este sentido, Mohamed Mohand remarcó que Melilla se tiene que creer que es “una ciudad plural y diversa”, así como respetuosa entre las diferentes religiones y culturas. Espera que no se genere crispación ni discusión entre los vecinos por un tema como este, pues debe ser un elemento de unión.
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