La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, asegura que las cámaras que forman parte del sistema de frontera inteligente ofrecen más efectividad y mejores condiciones de trabajo a los agentes que desarrollan su labor en Beni Enzar.
Indica que se van cargando los datos en la base y conforme van funcionando los registros que se insertan, van saltando las alarmas. En el momento en el que se ve que funciona, se van incorporando más registros y otros perfiles de personas que no deben entrar en la ciudad. “En el momento que las cámaras asumen esos datos y hacen sus funciones se siguen cargando hasta que se finalice esta tarea con toda la información que se estime conveniente”, añade.
Moh afirma que el objetivo es detectar todos los perfiles de personas que no deben entrar en la ciudad por diferentes motivos.
La delegada del Gobierno destaca que no solo en la época de Navidad se intenta que haya fluidez, sino que indicó que siempre está muy transitada y se intenta dar facilidad en el paso combinado con la seguridad. “Es imprescindible y muy bueno la instalación de las cámaras de reconocimiento facial porque eso va a hacer que la frontera sea más segura y que los agentes que están en la primera línea puedan contar con esta herramienta y tener un trabajo más efectivo y en mejores condiciones para ellos”, asevera.
Insiste en que la fluidez de la frontera es una cuestión que se hace cada día y no solo en la Navidad, cuando viene más gente a comprar a la ciudad. “El objetivo es que la frontera sea fluida siempre y no solo en periodo navideño”, asevera.
El Gobierno agiliza salidas de migrantes para bajar las cifras del CETI
El Gobierno está agilizando los traslados a la península de grupos de inmigrantes que han accedido de forma irregular a Melilla para aliviar la ocupación del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que se encuentra muy por encima de su capacidad máxima con más de 1.500 acogidos.
Así lo ha destacado la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, que informó de que algunas semanas se han proyectado varias salidas de grupos de inmigrantes, lo que ha permitido rebajar la ocupación en los últimos días.
En noviembre, tras la llegada de varias pateras consecutivas a las islas Chafarinas y el traslado de inmigrantes rescatados de una patera naufragada a 30 millas de Melilla, el CETI de la ciudad autónoma registró una de las ocupaciones más altas de los últimos meses, con 1.600 acogidos, un 60% más de su capacidad máxima.