El vicepresidente espera que no se repita un caso así “por el bien de la democracia”. El Gobierno de la Ciudad Autónoma expresó ayer su deseo de que una situación como la originada por el caso del voto por correo, en el que están imputados los dirigentes del Partido Socialista (PSOE) y de Coalición por Melilla (CpM), así como dos ex delegados del Gobierno, José Fernández Chacón y Gregorio Escobar, también actual secretario general del PSOE local, no se vuelva a producir, “porque daña la imagen de la ciudad”.
En declaraciones realizadas a los medios de comunicación, el vicepresidente primero del Gobierno local, Miguel Marín (PP), señaló que todo lo relacionado con este asunto, que investiga la supuesta compra de votos a cambio de puestos de trabajo en las elecciones generales de 2008, “no es bueno para Melilla”.
Asimismo, aseveró que se trata de un tema que “nunca tendría que haber sucedido”, por lo que ha deseado que no se vuelva a repetir en el futuro por el “bien de la ciudad y de la democracia”.
De igual modo, el vicepresidente autonómico subrayó que deben respetarse las decisiones tomadas por la Justicia en este aspecto, para que ésta pueda “seguir actuando”.
Hay que recordar que en la jornada de ayer, el Juzgado de Instrucción Número 4 de Melilla imputó a Escobar y Chacón por su supuesta relación con la trama de compra de votos, un tema en el que también está imputado el líder de la oposición, Mustafa Aberchán, y el anterior líder de los socialistas melillenses, Dionisio Muñoz.