Mi Melilla

Aparcamos hoy hablar de política y de políticos, quizás porque no e lo merezcan y allá ellos con sus avatares en muchos casos poco edifican tes, sino todo lo contrario, hasta náuseas dan en ocasiones y cada cuál aguante su vela.

La actualidad estos días finales de junio viene dada por ese acontecimiento Renacentista que al parecer llevaba unos cuatro años sin celebrarse y me parece muy mal, esos acontecimientos medievales le gusta al pueblo melillense y su ciudadanía y más celebrándose en ese entorno maravilloso de Melilla la Vieja, lugar entrañable de nuestra historia con su entorno extraordinario del mar y el puerto para envidia y admiración de los que visitan Melilla y quedan prendados. Estos días la visitan las numerosas Casas de Melilla de la Península y no se si de alguna de las islas. Fotos maravillosas publicadas por el Faro que a mí también me dan mucha envidia. Hoy domingo leo y veo en El Faro las fotos de ayer sábado, todo precioso y muchos visitantes. Además me han encantado dos entrevistas a una paisana y paisano por el cariño que demuestran a nuestra tierra. Ella Lidia Robles Gallardo qué gran amor por los animales y plantas, toda la entrevista muy dulce y ejemplar. También el reportaje sobre el Policía Nacional Fernández que aunque nacido en Burgos se siente melillense y recuerda muy bien sus tiempos de chinorri y los juegos con los amigos por su Barrio de la Victoria. Y también una pareja que practica deporte llamado mushing con sus perros, lo desconocía, son José Félix Moreno y María Muñoz , gran amor por los perros también, muy edificante. Gracias a todos los nombrados y mi mayor reconocimiento y respeto.

Ya metidos de lleno en pleno verano, aunque al principio y con altas temperaturas echo la mente y vista hacia atrás y se me agolpan recuerdos muy nostálgicos pasados precisamente en verano, con nuestras vacaciones escolares, rodeados de buenos amigos/as del barrio y de otros lugares. Acabada la temporada oficial de nuestras diferentes ligas, cadete y juvenil en mi caso, había que pasar el tiempo lo mejor posible. En aquellos tiempos (no como ahora) no se salía tanto de nuestra ciudad hacia otros lugares de España. Yo salí con mis padres y hermano menor (Manolo él tendría solo unos 9 años) precisamente por primera vez con unos 15/16 años hacia Almería, era el bautizo de nuestra primera sobrina (Mari Carmen), hija de nuestro hermano mayor Paco, era Policía Nacional (Policía Armada entonces) destinado en esa ciudad hermana, la del Zapillo, su Rambla, Alcazaba y Puerta Puchena. En aquella fechas había feria y lo pasé de maravilla después de hacer amigos/as de la vecindad de la familia, la barriada si no recuerdo mal se llamaba La Bola Azul o parecido. Desgraciadamente ahora mismo mi hermano mayor después de una intervención muy difícil y peligrosa, se encuentra internado en el hospital Vithas de Castilleja de la Cuesta. Tanto mi hermano Manolo desde Melilla con su esposa y yo desde Castellón con la mía, lo hemos visitado y confiamos pueda salir lo mejor posible de esa difícil situación actual en la que se encuentra (muy grave). Hablo con él a diario y fuerzas no le faltan, incluso va viendo el fútbol de la Eurocopa en la habitación, siempre bien acompañado y atendido por su esposa, hijas, nietos y demás familia que lo atienden con mucho cariño. Nosotros nos tuvimos que venir por circunstancias familiares del cuidado de nietos (padres trabajando y ellos sin escuela). Quiera Dios que salga adelante, le puedan dar el alta y seguir viviendo lo que el destino y Dios quieran. ¡Querido hermano mucho ánimo y fuerza, tú puedes!

Tanto este hermano que me lleva unos 7 años, tiene 80 cumplidos en mayo, como Rafa, el que se nos fue en octubre hará dos años, eran unos expertos nadadores y buceadores en nuestros Cortaos y Playitas, yo les acompañaba siempre, aunque con bastante menos edad me limitaba a nadar y bucear pero sin escopeta, ni cocle. Ellos sí que que cogían con los amigos Ricardo y Jamete muchos peces y pulpos, en ocasiones algún mero y lo catábamos casi toda nuestra calle F del Monte María Cristina, solían ser grandes y se repartían, pulpos también, en el patio de la casa de Jamete lo cocinaban y era una delicia, y si digo mejillones y bien hermosos caían cientos de ellos, recuerdo que a mi buen padre competeño él, Antonio, le encantaban y se los preparaba a su manera: sacaba la carne y los ponía en un plato, añadiendo aceite, algo de vinagre, ajo y perejil picadito, estaban maravillosos y yo los disfrutaba también.

Mi calle era muy transitada peatonalmente, no podían circular coches, una escalera por arriba que daba a calle A y un paso estrecho entre un muro que daba al barranco y a la esquina de una vivienda. Seis familias solo y gran vecindad y amistad, buenos partidos jugábamos en esa calle aunque hacía algo de cuesta, abusando cada equipo cuando tocaba jugar hacia abajo. Recuerdo con mucho cariño aunque algunos falten a nuestros vecinos y de calle A: Ricardo, Jamete, su sobrino “Ramallet”, el “Topo”, los hermano Alonso Périz (Pepe de mi edad y Alejandro uno o dos años menos), Mariano, Mingorance y un amigo de mi hermano llamado José “Pituy” Chamorro, vivía por Castellar o Arturo Reyes, pero acudía mucho a mi calle para estar con ellos y su novia Mari Carmen del Monte de arriba, mi calle era muy transitada por los que subían esa larga escalera de los eucaliptos viniendo de abajo (Explorador Badía, Barceló, Margallo, cuartelillo y Mercado Central o Plaza), siempre saludándonos a su paso. Esa calle ahora denominada Río Segura y la de arriba Río Ebro.

Qué vecindad más bonita y cariñosa entre todos teníamos. Siempre me gusta recordarlos y quién pudiera volver a ese pasado que a pesar de las muchas carencias existentes, nos las ingeniábamos para pasarlo lo mejor posible. Salud y suerte paisanos/as, como la que necesita mi querido hermano aún hospitalizado, que los médicos y Dios lo mantengan aún mucho tiempo lo mejor posible.